Festival para cerrar la temporada

El de ayer fue el Antequera de las grandes ocasiones. El que permitió que el público acabara haciendo la ola y alargando el aplauso de final de curso con la octava plaza bajo el brazo. Precisamente la que se consiguió durante una espectacular primera vuelta y que ayer recuperó a pesar de firmar un final de campeonato mediocre. El club cerró su mejor temporada en Asobal demostrando sus virtudes y sus defectos. Pero también dejando claro que los mimbres están puestos para el futuro.

Porque la actuación de los jóvenes ayer fue inmensa. Nacho Soto marcó su gol y Luisfe Jménez volvió a marcar las diferencias en ataque con su lanzamiento de distancia, aunque ayer también destacó en defensa. El tercer junior, Nacho Moya, tuvo poco tiempo para mostrar su calidad, ya que tuvo que salir en camilla del terreno de juego tras un espectacular golpe.

Dos pilares que dejan claro que el futuro está ahí, a pesar de la marcha del goleador Ohm (que nunca convenció a Ortega), de Vico, Ostarcevic y García Vega.

También sirvió el partido de ayer como bienvenida a José Luis Pérez Canca, que jugó su último partido con Granollers antes de recalar en las filas verdiblancas dejando detalles de su calidad y su buen juego, prácticamente los únicos de un equipo que ayer apenas tuvo balonmano. Factor que permitió la fiesta total en Antequera, que se coloca como único equipo andaluz en Asobal tras los descensos de Almería y Algeciras.