Tapia coge la batuta

Tras delegar el trabajo de los primeros días, en la primera sesión en Benahavís el técnico comenzó a concienciar a los suyos de lo que quiere · "Circulad el balón" fue la frase que más repitió en la sesión

Los jugadores del Málaga, con Antonio Tapia y Enrique Ruiz, en el césped del anexo antes de partir a Benahavís.
Los jugadores del Málaga, con Antonio Tapia y Enrique Ruiz, en el césped del anexo antes de partir a Benahavís.
José L. Malo / Benahavís / Enviado Especial

22 de julio 2008 - 05:02

Antonio Tapia es un privilegiado en el Málaga. Cuenta con el cuerpo técnico que siempre le ha acompañado, el que él deseaba, con el añadido de Dely Valdés, un hombre de la casa y una promesa de los banquillos. En ellos estaba descargando el trabajo de la primeras sesiones. Con el equipo ya asentado en Benahavís, llega su hora. Ayer por la tarde, en el primer entrenamiento en el nuevo cuartel general, hizo gala de lo que quiere ver el primer día.

"Circulad el balón" fue la frase que más repitió el baenense en los casi 75 minutos que duró la sesión vespertina. Tras mantenerse a la expectativa en los rondos que hicieron los jugadores para soltar piernas, el tránsito a las jugadas con balón le hizo aparecer en escena. Con una alta exigencia por la fluidez en el fútbol, comenzó su alegato por el buen balompié. "Implicad a los porteros" o "no deis más de dos toques" fueron las órdenes a través de su famoso amplificador de voz que rompían el hieratismo con el que había afrontado las anteriores sesiones.

Los futbolistas eran bien conscientes de ello, como ya vaticinaba tras el ensayo de la mañana en el anexo uno de los jugadores con los que más ha trabajado: Jesús Gámez. "Ya sabemos lo que nos espera en Benahavís, el trabajo duro. Tapia lo está haciendo de forma progresiva, pero está claro que ahora va a empezar lo más duro de la pretemporada", explicó ayer el lateral fuengiroleño.

De lo que también tenían conocimiento era del fuerte calor que se esperaba en la localidad costasoleña, si bien más de uno acabó ayer más que sorprendido. "¿Hace más calor aquí que en Antequera, verdad?", preguntaba Baha camino del hotel tras el ensayo, mientras que otros como Apoño se preguntaban cómo sería la situación al mediodía si ellos se ejercitaban a una hora fresca.

Quienes apenas pudieron dar cuenta de ello fueron Salva, Silva y Rossato, que se entrenaron en el gimnasio y haciendo carrera continua luego por diversas molestias sin consideración. Asimismo, el joven Edu Ramos no se incorporó por problemas estomacales, aunque sí lo hizo el lateral izquierdo del filial Manu.

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