Pepe Quero trae a Málaga sus versos a modo de "despropósitos"

No es un autor novel aunque a muchos se lo parezca. Pepe Quero lleva escribiendo poesía "desde chico". Su vida está entregada al teatro, a la palabra hablada, "a comunicar", insiste. No había tenido oportunidad de dar a conocer su obra hasta que la joven editorial sevillana Cangrejo Pistolero Ediciones le lanzó la propuesta. Ahora bajo el lema Tengo un amigo que no tiene amigos el fundador de la compañía Los Ulen presenta un compendio de 128 poemas a modo de "dardos envenenados" o "despropósitos", define Quero. Esta tarde ofrecerá una lectura dramatizada en el Teatro Cánovas, donde también firmará y regalará ejemplares de su libro.

En tono "agridulce", viaja por la memoria para rescatar a los suyos, a su familia, a aquellos que más le han influido, para regresar luego al presente y encontrarse con sus vecinos. Como buen "urbanita", este granadino residente en Sevilla retrata también el día a días por sus calles, como si de un policía municipal se tratase. "Pero a mí lo que me gusta es la poesía municipal", advierte el actor para presentar una de las tres partes en las que está estructurada esta obra.

Quererías da nombre a la sección de "exabruptos", de quejas con rima interna "y mala leche" con la que Quero gusta meter el dedo en la llaga "para despertar algunas cosas de esta sociedad que están muy edulcoradas", añade. Y como ejemplo apunta recuerdos de una infancia no siempre de color de rosa. "Tenía dos profesores fascistas que me hostiaban la cara", evoca. Para su autor, las páginas de este libro no es que sean precisamente políticamente incorrectas. "Es que me parece una incorrección la política", matiza el actor. El tercer apartado de Tengo un amigo que no tiene amigos se reserva a lo que su autor denomina Rememoria histórica, donde evoca su anecdotario familiar.

Cuando se trata de establecer distingos entre la faceta interpretativa y la literaria Quero se muestra taxativo. "Mi trabajo en sí es una comunicación constante con el espectador. No se me ocurre un poema si no es hablado y retransmitido". aclara. Y la simbiosis continúa. Tanto en sus versos como los textos dramáticos que ha publicado el granadino emplea ese tono humorístico e irónico "que caracteriza a nuestra cultura mediterránea", añade. Ese reírse ante el dolor o ante la cercanía de la muerte como mecanismo de supervivencia. "Siempre hay una lágrima cargada de sonrisas y al revés. Todo es una tragicomedia", reflexiona Quero. Acompañan a Pepe Quero en este estreno poético el cantante Kiko Veneno, que ha realizado el prólogo y los artistas plásticos Miguel Ángel Porro y Angelino Carracedo, como ilustradores.

Para la lectura dramatizada que realiza de este poemario por distintos escenarios a Quero le gusta rodearse de compañeros de profesión. Esta tarde los actores Miguel Zurita, Aníbal Soto y Olga Salut recitarán algunos de sus poemas. "Aprendo mucho escuchando", remata Pepe Quero.