El 3 de diciembre

EL día 3 de diciembre se celebrará el día internacional de las personas con discapacidad, un término reconocido por la ONU y que a pesar de su aprobación institucional, la dignidad del colectivo de personas que convive con una discapacidad se ve truncada al leer o escuchar vocablos aún a día de hoy como impedidos, enfermos, deficientes o minusválidos. En ocasiones se cree que es indistinto el uso de minusvalía y discapacidad. En el primero, hablamos del valor de las personas, algo que es difícil de evaluar y, en segundo término, se hace referencia a las capacidades, ya que una persona puede no estar capacitada para desarrollar una tarea concreta, pero sí estarlo para muchas otras. Sin duda alguna, el lenguaje abre puertas y también puede romper otras. No es recomendable acercarnos a una persona con discapacidad citándola como impedida o deficiente. El uso del lenguaje ayuda a normalizar también esta situación en cuanto al trato y, sobre todo, haciendo referencia a la dignidad de muchas personas.

Durante los próximos días la ciudad de Málaga abre sus puertas para exponer y presentar las iniciativas y proyectos que desde hace meses llevan trabajando asociaciones y entidades en pro de una normalización en cuanto al trato y acceso óptimo de las personas con discapacidad a cualquier espacio de la ciudad, ya sea un museo, un puesto de trabajo, un centro de ocio, etc. Podremos disfrutar del cine, obras realizadas por personas con y sin discapacidad, para todos los públicos, donde podremos ver sin coste alguno la última obra del director y guionista Albert Espinosa. Además, las asociaciones de vecinos podrán asistir a unas jornadas de sensibilización con expertos en accesibilidad a los entornos de nuestra ciudad. Personas que desde su experiencia actúan de hilo conductor para trasmitir sus conocimientos para que nuestros vecinos puedan ponerlos en práctica.

Estas iniciativas hacen visible el camino positivo de muchas mujeres y hombres de Málaga, motores de un cambio social en pro de la igualdad y la mejora de sus derechos como ciudadanos. Personas que piensan en soluciones y que necesitan ser escuchadas para mejorar, entre otros, los accesos para una incorporación real de la discapacidad en puestos de trabajo dignos a los que estudiantes universitarios o de ciclos formativos puedan aspirar como cualquier otro compañero o compañera de estudios. Para poder contar con un periodo formativo en igualdad de condiciones, en el que las expectativas para ambos sean similares, sin que la discapacidad sea menoscabo para optar a ofertas de empleo cualificado, empleos a los que por su formación y cualificación estén abiertos para todos. El aspirante a un determinado puesto ha de ser evaluado por sus capacidades y no por su discapacidad, permitiendo de esta forma una igualdad real, en la que se empleen todas las ayudas disponibles para la contratación y adaptación del puesto de trabajo, recursos en los que la empresa que contrata no tiene que realizar ninguna inversión. Es más, es el empleador el que por contratar recibe beneficios que resultan muy interesantes para sus cuentas.

Este día internacional de las personas con discapacidad debe ser un encuentro entre unos y otros, un día en el que las empresas se asomen, vean y conozcan como una persona con discapacidad puede acceder por su cualificación a una oferta de empleo y ocuparlo finalmente en semejantes condiciones que otro. Un momento en el que los arquitectos también se mezclen para observar y escuchar las mejoras que necesitan los parques y edificios de nuestra ciudad. Un espacio donde debe estar también el sector turístico, uno de los pilares económicos de nuestra provincia y región, que no puede volver la vista atrás ante la demanda de muchas miles de personas que desean disfrutar de su ocio y tiempo libre y que al no contar con accesos en hoteles, transportes, etc., ven truncada esta posibilidad.

Durante los próximos días los malagueños debemos acercarnos para palpar lo que se hace desde estas asociaciones, dónde están y cuáles son sus proyectos o servicios.

Este día debe ser un foro en el que unos y otros actuemos de forma participativa para caminar con la misma idea, normalizar una situación desigual desde hace muchos años y que, entre todos, unamos las piezas de este puzle con ganas de tomar forma óptima y estructura uniforme y equilibrada.