DeVries: "Soy un tirador, pero sé cuándo pasarla"

Troy DeVries llegó a primera hora de la mañana procedente de Melilla, allí se despidió de sus ya ex compañeros, que jugaban por la tarde en Benahavís con el Clínicas y compartían vuelo. Pasó el reconocimiento médico y acto seguido ya se entrenó con los que serán sus colegas hasta final de temporada, al menos. El escolta de 29 años y 1.92 metros firma hasta junio con la opción del club de prorrogarle el compromiso.

Devries, que destaca por su tiro exterior, dice que es un jugador completo. "Soy un tirador, creo que entiendo bien el juego, sé cuando hay que tirar, cuando hay que pasar, siempre doy lo mejor de mí mismo, siempre estoy al cien por cien y Dios es mi ayuda. Esta es una gran oportunidad para mí y me siento bendecido por estar aquí", explicaba el jugador, del que su entrenador, Chus Mateo espera "que aporte un poco más de energía ofensiva, de uno contra uno, de acierto de la línea de 6,75, de puntos en definitiva, algo de lo que últimamente estamos careciendo bastante. Es decir, un soplo de aire fresco en nuestro juego de ataque. Es algo más que un tirador puro. Sin ser seguramente un supermanejador de balón que pueda llegar a finalizar, en penetraciones hasta debajo del aro es capaz de hacer muy buenos porcentajes de tiros de 2, tira con un 57 % y hacer 20 puntos aunque sea en la LEB Oro, es algo que da una garantía de que aportará seguro".

DeVries vestirá el número 8 y ya fue dado de alta en el lugar de Gerald Fitch, por lo que viajará mañana a Vitoria para jugar ante el Caja Laboral el domingo a las 18:00 horas. Un estreno de máximo nivel.