El dueño de Magrudis declara que "tiró a la basura" la carne contaminada

El dueño de Magrudis, José Antonio Marín Ponce, ha asegurado este jueves en su declaración a la juez que investiga el lote de listeriosis que "tiró a la basura" la carne contaminada, después del positivo que se detectó en un lote en febrero pasado, en unos análisis realizados por el laboratorio Microal, y ha asegurado que limpiaron con "lejía" y otros productos, y que después "repitieron los análisis" y en ese caso ya dieron negativo en los meses de mayo, junio y julio.

Ese positivo en listeria fue ocultado hasta el mes de agosto, cuando se decretó la alerta sanitaria, pero según el gerente de Magrudis, José Antonio Marín, desconocía que tenían la obligación de informar a la administración sanitaria, aunque la Fiscalía de Sevilla, que ha pedido el ingreso en prisión sin fianza del dueño y de su hijo Sandro José Marín -que figura como administrador de Magrudis-, considera que se han incumplido "todos los deberes de informar" a las administraciones sanitarias, y los decretos 1528/12 y 1945/96, que regulan el destino de los desechos de este tipo de actividades y la obligación del autocontrol, respectivamente.

El dueño ha alegado que ignoraba que tenían que comunicar el positivo en listeria a la administración sanitaria, han indicado fuentes del caso, que han añadido que tanto el padre como los dos hijos han declarado que "lo hacían lo mejor que podían".

José Antonio Marín ha afirmado en su declaración, en la que sólo ha respondido a las pregunta de la juez Pilar Ordóñez y de su abogado, que antes de elaborar la carne mechada de la firma La Mechá había trabajado "vendiendo choped" hasta 2015, pero ese año con la crisis y como él "sabía de cocina" decidió meterse en el mercado de la fabricación de estos productos.

Preguntado sobre por qué sus hijos figuraban uno como administrador de Magrudis y el otro como responsable de otra empresa cárnica, José Antonio Marín, ha señalado que "tenía deudas", han indicado fuentes del caso.

Cuando se detectó el positivo en listeria, que el laboratorio Microal les comunicó por correo electrónico el 22 de febrero pasado, tan sólo cuatro días después de que se le remitieran dos muestras de carne mechada para su análisis, los responsables de Magrudis han dicho que procedieron a tirar ese lote de carne "a la basura", pero según los investigadores "no está acreditado qué hicieron con ese lote contaminado".

Después de oír las declaraciones, la juez ha acordado el ingreso en prisión del padre y de Sandro José, mientras ha dejado en libertad al otro hijo.