Los villancicos suenan en el Parlamento doce años después
El Parlamento de Andalucía celebra la Navidad, la aprobación del Presupuesto y el fin del período de sesiones a la manera tradicional
El consejero Antonio Sanz al cajón, el diputado Jorge Saavedra y el jefe de seguridad de la Cámara, Jacinto Cruz, a las guitarras han animado el cante del que se ha borrado toda la izquierda
Hacía doce años que no se cantaban villancicos en el salón de plenos del Parlamento de manera institucional. Y el presidente de la Cámara, Jesús Aguirre, ha puesto tanto empeño que lo ha presentado como una propuesta a la Mesa del Parlamento para que todo el mundo se sumase. No lo ha conseguido porque la izquierda se ha borrado aunque el diputado Juan Antonio Delgado, de Por Andalucía, sí que ha asistido a algún ensayo. Al final, sólo los diputados de PP y Vox, y una buena parte del personal del Parlamento, han aprobado la moción y se han arrancado por los villancicos tradicionales.
El consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, al cajón; y el diputado Jorge Saavedra (que es profesor de música) y el jefe de seguridad de la casa, Jacinto Cruz, a las guitarras, han animado a sus señorías que han entonado villancicos clásicos, "Ande la marimorena", "Los peces en el río" y "Ya vienen los reyes", han formado parte del repertorio elegido y ensayado. A pesar de optar por lo más tradicional, había letras impresas para que sus señorías no se quedasen atrás. Y algunos hasta las han leído. El despacho del consejero Sanz ha sido el lugar elegido para los primeros ensayos y la Sala Jiménez Becerril ha servido para afinar las voces este mismo jueves.
Los villancicos han cerrado el año en el Parlamento andaluz y han celebrado la aprobación "en tiempo y forma" como ha dicho la consejera de Hacienda, Carolina España, del Presupuesto de la Junta para el año 2025. La despedida de los diputados y de todo el personal ha sido la tradicional: "Feliz Navidad". Bueno. La de todos no, los socialistas las deseaban a los ajenos mientras que de los compañeros de bancada se despedían con un "hasta mañana".
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