¿Cuáles son las consultas más frecuentes en Podología?

Recientemente, se ha aprobado la presencia de especialistas en Podología en la sanidad pública de Andalucía. Así lo detalla el último Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), el cual publicado la resolución que crea la categoría de podólogo en los centros sanitarios del Servicio Andaluz de Salud.

Este hito marca un avance significativo en la estructura del sistema público de salud andaluz, adjudicando a los podólogos naturaleza estatutaria y reconoce su capacidad diagnóstica y prescriptora. Esta medida permitirá que muchos pacientes, que hasta ahora solo podían acceder a estos servicios a través de la sanidad privada, reciban un tratamiento especializado y de calidad en el sistema público.

Importancia de la Podología

El cuidado adecuado de los pies es fundamental para mantener una buena salud y prevenir problemas que pueden afectar la movilidad y calidad de vida. En este sentido, debido a la dificultad para acceder al servicio de Podología mediante la sanidad pública, muchas personas optan por realizar intervenciones caseras o acudir a lugares no especializados para tratar problemas en sus pies. Esta práctica, aunque puede parecer económica y conveniente, conlleva riesgos significativos que pueden tener consecuencias graves para la salud.

La inclusión de especialistas de Podología en los centros del Servicio Andaluz de Salud se enmarca como un hito importante para aquellos andaluces que no podían permitirse un correcto cuidado de sus pies.  Estos especialistas están capacitados para diagnosticar y tratar una amplia gama de afecciones, desde problemas comunes como juanetes y uñas encarnadas, hasta trastornos más complejos como la fascitis plantar o el pie diabético.

Consultar a un podólogo no solo previene complicaciones mayores, sino que también mejora la calidad de vida al aliviar el dolor y promover una mejor postura y equilibrio, esenciales para una vida activa y saludable.

La Podología es una disciplina que requiere conocimientos profundos en anatomía, fisiología, biomecánica, patología del pie, farmacología y cirugía.

Servicios más comunes en Podología

Los servicios más comunes en podología abarcan una amplia gama de tratamientos enfocados en el cuidado y mantenimiento de la salud de los pies. Entre ellos destacan:

• Quiropodia: Tratamiento de problemas comunes en uñas, piel y callos, como la eliminación de durezas y uñas encarnadas.
• Tratamiento de heridas y úlceras: Especial atención a heridas en los pies, especialmente en pacientes con diabetes o problemas circulatorios.
• Análisis de la pisada: Estudio biomecánico para detectar irregularidades en la forma de caminar y el peso que soportan los pies, identificando problemas como pie plano o cóncavo.
• Plantillas personalizadas: Recomendación y creación de plantillas ortopédicas basadas en el análisis de la pisada para corregir la marcha y distribuir el peso de manera adecuada.
• Tratamiento de verrugas plantares: Terapias para eliminar verrugas causadas por el virus del papiloma humano (VPH).
• Cirugía podológica: Intervenciones quirúrgicas para tratar afecciones graves como juanetes, deformidades o espolones calcáneos.
• Ortesis de silicona: Dispositivos personalizados que ayudan a corregir deformidades como los juanetes o dedos en martillo.
• Tratamiento de lesiones: Manejo de esguinces, tendinitis y fascitis plantar, utilizando terapias como fisioterapia y ejercicios específicos.

¿Cómo saber si necesito acudir a un Podólogo?

Existen numerosas señales que alertan de la necesidad de acudir a un especialista en Podología. Algunas de las más comunes son dolor persistente en los pies, talones o tobillos, dificultad para caminar, o molestias al usar calzado.

Otros indicios incluyen la presencia de callos, durezas, uñas encarnadas, juanetes, o cambios en la piel, como sequedad excesiva, grietas o infecciones. Las personas con condiciones crónicas como diabetes, artritis o problemas circulatorios también deben hacer visitas regulares para prevenir complicaciones graves.