Matalascañas comienza a aliviar la presión sobre el acuífero de Doñana

Con menos velocidad de crucero de la deseada dada la complejidad de las medidas a adoptar, el Acuerdo por Doñana, firmado entre la Junta y el Gobierno central en noviembre del año pasado, comienza a plasmar las resoluciones que, en última instancia, deberán suponer un alivio en la extracción de recursos de aguas superficiales. Ayer, el responsable de la Oficina Técnica de Doñana del Ministerio de Transición Ecológica (Miteco), Emilio Rodríguez, anunciaba la tramitación ambiental y la autorización por parte de la Junta para la construcción de dos sondeos y sus respectivas conexiones para la red de abastecimiento del núcleo urbano de Matalascañas, así como la renovación de la red de distribución en alta que abastece la zona. En esencia se trata de sustituir dos sondeos existentes en el municipio que en verano llega a las 150.000 personas como residentes temporales, por otros emplazados a 150 metros de profundidad que “evitan su incidencia sobre las fuentes hídricas de las que se nutre directamente Doñana y algunos de los ecosistemas lagunares más cercanos a la zona poblada”.

Estos dos pozos, y sus respectivas conexiones, tienen un presupuesto de 2,5 millones de euros –inicialmente contaba con 1,2 millones de presupuesto– y su puesta en marcha se tramitará en procedimiento de urgencia habiendo iniciado ya su proceso de autorización y de información ambiental, que corresponden a la administración autonómica, tras sondeos previos de carácter científico que han arrojado “resultados favorables”. Al respecto, uno de esos sondeos, utilizados para investigación hasta la fecha, podrá ser puesto en uso como pozo para abastecimiento de forma inmediata. Del mismo modo, el Ayuntamiento de Almonte aún debe dar su visto bueno respecto a distintos trámites de carácter municipal, entre ellos y de los más significativos, la autorización para que el trazado de la tubería que redistribuye el suministro pueda discurrir por un camino de su titularidad.

“En cualquier caso, estas y otras actuaciones que estudia el Gobierno de España aseguran que los usos y servicios de Matalascañas sean compatibles con la defensa y mejora de los valores medioambientales de Doñana, y no que vayan en menoscabo de los mismos como tantas otras veces en el pasado”, apuntó Rodríguez. Entre esas otras actuaciones, con vistas a futuro, se valoran opciones que permitan “favorecer la mejora del nivel de los acuíferos de forma inmediata”, mediante la posible reutilización de aguas residuales de la nueva EDAR de Matalascañas –en fase de redacción de un nuevo estudio de alternativas–, así como gracias a una posible recarga de los acuíferos con aguas regeneradas.

Ecologistas

El portavoz de la Oficina Técnica de WWF en Doñana, Juanjo Carmona, recordó que en reiteradas ocasiones “nos hemos comprometido a dar una solución definitiva a Matalascañas que pasa por traerle agua superficial desde el núcleo Mazagón”, en concreto de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) Tinto situada en la localidad de Moguer.

Carmona señaló que hay otras medidas complementarias necesarias como “arreglar el sistema de distribución del agua en Almonte o la posible reutilización de aguas de la EDAR que se instale en Matalascañas, porque hay que instalarla ahí y no en otro lugar y con las mejores tecnologías posibles”. Dentro del conjunto de acciones que tiene que llevarse a cabo en la localidad, “la más urgente, la más necesaria y la más importante y la que no se está poniendo en marcha por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) y por parte del Ministerio, es traer el agua desde Mazagón”.

“Cambiar los pozos de sitio sencillamente es cambiar el problema de lugar, es dejar de afectar a una zona de lagunas de Doñana para afectar a otros ecosistemas y poner en peligro otros de la zona en otro lugar como pueden ser, por ejemplo, las turberas u otro de lagunas que a día de hoy no se pueden recuperar debido al estado del acuífero, pero que si el acuífero estuviera bien podrían aparecer y restaurarse”. Según Carmona, el Estado sabe que “esa es la medida, porque además conoce su efectividad en otro lugar, la zona de Los Mimbrales, donde después de la compra de la finca y el cese de las extracciones de agua automáticamente, sin necesidad de muchos más acciones y sin necesidad de grandes años de lluvia el acuífero empezó a recuperarse”.

“En Matalascañas es exactamente lo mismo, y ya lo saben; trasladar los pozos de lugar, por lo tanto, es una medida que no soluciona el problema solamente lo traslada, así que esperemos que desde el Ministerio se ponga en marcha cuanto antes la medida absolutamente imprescindible, traer el agua de Mazagón”, ha concluido.

Ayuntamiento

Por su parte, el alcalde de Almonte, Francisco Bella, pidió establecer una “estrategia integral” con el Miteco en la que se incluyan todas las actuaciones “necesarias” que den “soluciones a los problemas de Doñana”, ya que “lo que se haga no puede ser actuaciones puntuales”. “Entendemos que tiene que haber un documento integral donde todo eso empiece a funcionar y que dé respuesta a los grandes problemas que tenemos y no hacerlo de manera puntual. Por ejemplo, llevamos 25 años esperando una depuradora, algo muy importante y por la cual el propio Estado está recibiendo sanciones de la UE”.

Bella insistió en que las “actuaciones que se hacen sobre los pozos que luego se utilizan para riego, las sanciones, todas las recargas del acuífero, obras que se están haciendo, o las subvenciones que se están repartiendo en el entorno que no corresponde a lo que le pertenece a Almonte”.

El regidor recordó que traer agua superficial a Matalascañas “supondría un coste adicional de un millón y medio de euros que tendrían que soportar los propios usuarios”, algo que en su opinión “no es justo” y “es necesario hablarlo en otros términos y otras consideraciones”. En cuanto a la renovación en alta de la red de abastecimiento del núcleo urbano de Matalascañas, Bella explicó que el proyecto vendría por el borde del Parque Nacional, desde prácticamente Mazagón hasta el núcleo costero, con lo cual, en su opinión, “justifica también que no hubiera inconveniente en trasladar la depuradora de Matalascañas hasta El Rocío, con lo cual evitábamos el riesgo de vertidos al mar, la bandera azul y todo ese tipo de consideraciones que hemos puesto encima de la mesa”.