El alcalde de Antequera pide liberalizar el peaje ante los atascos de la A-45 en Casabermeja

Antequera/El alcalde de Antequera, Manuel Barón, ha manifestado su preocupación y malestar por la situación "insostenible" que, a su juicio, viven diariamente los usuarios de la autovía A-45 debido a las frecuentes caravanas que dificultan seriamente el tránsito entre Antequera y Málaga. Y es que se están produciendo retenciones en la zona de Casabermeja debido a las obras de arreglo de una de las laderas próximas a la autovía que resultó dañada por las últimas lluvias

Barón, que ha visitado la zona, ha denunciado que "estos problemas no solo afectan al día a día de los ciudadanos, sino que también suponen un obstáculo para el desarrollo económico y turístico de la ciudad y de toda la comarca".

Como solución inmediata y temporal, el regidor antequerano ha propuesto que el Gobierno central libere el peaje de la autopista AP-46 y asuma el coste del mismo mientras se adoptan medidas definitivas para la A-45. El alcalde ha subrayado que "no se puede permitir más esta situación de caos que afecta a miles de conductores, especialmente en horas punta y fines de semana", destacando que esta medida permitiría descongestionar considerablemente la A-45 y mejorar de forma inmediata la movilidad y no sólo un día como ya se hizo.

Además, ha exigido una planificación urgente y una inversión real que garantice la fluidez del tráfico y evite los colapsos frecuentes. "Desde el Ayuntamiento llevamos años solicitando mejoras concretas, pero seguimos sin respuesta efectiva. Necesitamos soluciones inmediatas porque la ciudadanía no puede seguir sufriendo estos atascos continuos que perjudican enormemente a la economía local y regional, a lo que se une la ineficacia de las conexiones ferroviarias para estudiantes o trabajadores que se tiene que desplazar todos los días a Málaga", ha insistido el alcalde.

Finalmente, Barón ha asegurado que continuará exigiendo respuestas "claras y eficaces" hasta que se solvente una situación que, según ha recalcado, "no solo afecta negativamente a la calidad de vida de los antequeranos, sino también a la imagen y la proyección económica de la ciudad y de toda la zona".