Mahou San Miguel: un euro de impacto económico por cada tres cervezas elaboradas

EL sector cervecero en España tiene un peso significativo en la economía nacional, con una capacidad de producción que no solo satisface el consumo interno, sino que también impulsa exportaciones. Empresas como Mahou San Miguel son cruciales en este panorama, por su volumen de producción y por su capacidad de generar riqueza en las comunidades donde operan. La compañía, que elabora sus productos en sus ocho fábricas de cervezas en España y tres en Estados Unidos y en sus cuatro manantiales de agua, tiene una huella industrial única que le permite tener una conexión directa con el entorno socioeconómico en el que se asienta. En el caso específico de Andalucía, la región ocupa un lugar destacado dentro de las operaciones de la compañía, ya que un tercio de su huella industrial está localizada allí. Desglosado el dato, Mahou San Miguel cuenta en la región con tres plantas de producción de cerveza en Málaga, Granada y Córdoba, además de un manantial de agua mineral en Jaén. Este despliegue empresarial genera 480 empleos directos y 23.000 indirectos, y la colaboración con más de 370 empresas locales a través de compras y servicios que suponen 70 millones de euros anuales.

A nivel nacional, Mahou San Miguel genera 4.000 empleos directos y 147.000 indirectos, contribuyendo con 2.340 millones de euros al PIB, lo que representa aproximadamente el 0,2% del total nacional. Esta cifra refleja el impacto de su capacidad productiva y su compromiso con la creación de empleo y el apoyo a sectores dependientes, como la hostelería y la agricultura. Por cada tres cervezas que produce, la empresa genera un euro de impacto económico en el país, una contribución que se extiende a nivel regional en cada una de sus fábricas.

La planta de Málaga: un pilar en el crecimiento regional

Dentro de esta red industrial, la planta de Málaga se ha convertido en un motor de desarrollo para la región. Desde su inauguración hace casi seis décadas, la planta ha experimentado un crecimiento sostenido, favorecido por las continuas inversiones que Mahou San Miguel ha realizado para mejorar su eficiencia y sostenibilidad. En los últimos cinco años, la compañía ha destinado 50 millones de euros a la planta malagueña, impulsando su competitividad y minimizando su impacto ambiental. Estas inversiones han sido clave no solo para mantener la calidad y flexibilidad en la producción, sino también para asegurar la sostenibilidad a largo plazo de la planta.

El impacto económico de la planta se refleja también en sus relaciones comerciales con el tejido empresarial local. Solo en el último año, la fábrica realizó compras de bienes y servicios por valor de más de 20 millones de euros, apoyando a más de 100 empresas malagueñas. Este tipo de sinergias entre grandes empresas y proveedores locales son esenciales para el crecimiento económico de las regiones y refuerzan el compromiso de Mahou San Miguel con la comunidad malagueña.

Compromiso con la sostenibilidad

Uno de los sectores más beneficiados por la presencia de Mahou San Miguel es el de la hostelería, un pilar clave de la economía malagueña, especialmente vinculado al turismo. La compañía apoya el desarrollo de este sector mediante iniciativas como “Vamos Bares 2030”, que tiene como objetivo mejorar la sostenibilidad en los negocios de hostelería locales, ayudándolos a adaptarse a las nuevas demandas del mercado y a reducir considerablemente su impacto ambiental.

Asimismo, a través de la Fundación Mahou San Miguel, la empresa impulsa el programa “Creamos Oportunidades en Hostelería y Turismo”, que promueve la formación y empleabilidad de jóvenes que provienen de entornos con dificultades. Este programa, con una tasa de inserción laboral del 90%, está presente en Málaga desde hace cinco años, ofreciendo a los jóvenes una oportunidad de desarrollar su carrera en el sector hostelero, uno de los motores económicos de la ciudad. Estas iniciativas generan un impacto social positivo y ayudan a fortalecer el sector turístico, esencial para la economía de la provincia de Málaga.

En un contexto global donde la sostenibilidad se ha convertido en un requisito clave para las empresas, Mahou San Miguel ha implementado estrategias que priorizan la reducción de su huella ambiental. La planta de Málaga es un ejemplo de este compromiso, con medidas que van desde el uso de energía 100% renovable hasta la gestión de residuos bajo la premisa de “residuo cero”, reutilizando el 99,9% de los materiales generados en el proceso de producción.

Además, la proximidad de la cadena de valor de Mahou San Miguel, con el 94% de sus materias primas de origen nacional, contribuye a reducir las emisiones de dióxido de carbono relacionadas con el transporte y apoya a los productores locales. Esta integración de sostenibilidad en todos los niveles de la cadena productiva no solo asegura un impacto ambiental reducido, sino que también refuerza la competitividad de la compañía en un mercado cada vez más orientado hacia prácticas responsables.