Aroma de partido grande

El foco esta semana está dividido entre el Unicaja-Barcelona de las 12:30 horas del domingo y lo que ocurrirá fuera de la pista, en el homenaje a los subcampeones de la ACB ante el equipo culé en la temporada 94/95. Quizá es una buena manera de tener más tranquilidad y concentrarse en el trabajo para la plantilla, que, no obstante, sigue teniendo vida social. Ayer estuvo en el Puerto de Benalmádena para cumplir compromisos publicitarios y realizarse la foto oficial. Por la tarde, Will Thomas y Jayson Granger acudieron a Alhaurín de la Torre en una nueva etapa de la 'Caravana del play off', que lleva por colegios de la capital y la provincia el mensaje de que padres e hijos se unan a las eliminatorias por el título.

En la cita de Benalmádena, como en el entrenamiento matutino, no estuvo Ryan Toolson, aquejado de un virus intestinal que le ha tenido en cama. Ha tenido varios problemas de salud parecidos últimamente el escolta norteamericano, que ha enlazado una mala racha anotadora, en buena parte perjudicado por estas dolencias. El golpetazo de Slaughter en Madrid le dejó secuelas en el partido siguiente y se perdió algunos entrenamientos. No obstante, el domingo debe estar sin problemas a disposición de Joan Plaza.

El partido del domingo produce agitación en el entorno, hay más movimiento del habitual en la venta de localidades. Quedan poco más de 1.000 a la venta a cuatro días de la celebración el partido. Si ante el Madrid en las pasadas navidades se colgó el cartel de 'No hay billetes' ahora se puede repetir y alcanzar un Carpena repleto para una ocasión especial.

El club sigue moviendo con distintas iniciativas a través de las redes sociales el evento del domingo. Están 100% confirmados todos los jugadores salvo los dos norteamericanos, Mike Ansley y Kenny Miller. Babkov llegará mañana y Alfonso Reyes ha podido encontrar la fórmula para estar en Málaga y en la Final Four de Madrid como representante de la ABP (y como hermano de Felipe Reyes). Miller está pendiente de un permiso en el centro penitenciario en el que trabaja en los últimos años. Y Ansley, fiel a su fama de informalidad, no ha confirmado después de haber dicho que sí en primera instancia. Pero se confía en que aparezca el sábado. Habrá comida tras el partido, también durante el acto del sábado. Y en el descanso del duelo estarán todos en el centro de la pista para llevarse el reconocimiento de aquellos que hace 20 años se engancharon al baloncesto y vibraron en Ciudad Jardín y que en una casa moderna como el Carpena rememorarán aquellos viejos tiempos en los que el baloncesto explotó en Málaga.