Cook y el regreso que pudo ser

La pareja de bases del Unicaja para la temporada 2011/12 será, salvo cambio inesperado, la formada por Kristaps Valters y Earl Rowland. Se confirmará a la largo de la próxima semana. Obviamente, se manejaron distintos nombres y se hizo un estudio exhaustivo del mercado. Y uno de los nombres que más gustaba era, paradójicamente, Omar Cook , que el pasado verano salió de Málaga después de que el Unicaja no ejerciera la cláusula para prolongarle un año más su contrato. Se prefirió traer a McIntyre y la decisión, a toro pasado, resultó mala. Cook ha completado una notable temporada en Valencia y ya se sabe lo que ocurrió con el nuevo jugador del Virtus de Bolonia.

El caso es que el Unicaja, con el visto bueno del cuerpo técnico, contactó con el agente del jugador, Miodrag Raznatovic, para ver su disponibilidad una vez utilizó una cláusula en su contrato para quedar liberado de su vínculo con el Power Electronics. Cook pedía una cantidad próxima al millón de euros que hizo disuadir muy pronto al conjunto malagueño de la posibilidad de traer de vuelta al neoyorkino con pasaporte montenegrino y propició que se encarasen otras opciones más económicas.

El nombre de Cook sonó con fuerza para relevar a Ricky Rubio en el Barcelona y a Pablo Prigioni en el Real Madrid, pero ninguna de esas dos opciones parece fructificar. Tras hablarse también de la posibilidad del pujante Fenerbahce, el Armani Jeans Milano ha tomado la delantera para hacerse con los servicios de Omar Cook. Es petición de Sergio Scariolo, nuevo entrenador del legendario equipo lombardo, puesto que es un jugador de su gusto. Llevará el timón del Armani Jeans.