Davidovich se estrella con el muro Vesely

Alejandro Davidovich se despide de la segunda ronda de Wimbledon tras casi cinco horas y un final cruel ante el checo JiriVesely. Ya en súper break, un warning del malagueño con el 9-7 daba el triunfo a su rival. Volvió a mostrar todas sus versiones el tenista, que se encontraba y se perdía con la solidez que mostró durante todo el partido su rival. Encuentro para aprender de Foki, cruel pero educativo.

Davidovich sufría con la velocidad y el servicio de Vesely. El checo jugaba juegos cortos, rápidos, limitaba el peloteo y eso castigaba al malagueño que perdía su juego rápido en el primer set. Su rival se colocaba 4-1 con celeridad y Foki no lograba aprovecharse de las bolas de break que se granjeaba para recuperar el ritmo al partido. Vesely dominaba con su saque y el primer set caía pronto de su lado.

El segundo set comenzaba como un calco del primero. El malagueño perdía muy pronto su servicio y volvía a ir a contrapie, a contracorriente. Sacaba Vesely para llevarse el segundo set también con el 5-4 cuando despertó Davidovich con un par de chispazos llenos de rabia. Había tenido hasta ocho bolas de break hasta el momento que no pudo transformar pero la siguiente le sirvió para igualar y acabar dándole la vuelta a una segunda manga que acabó de su lado.

En la tercera manga se repetían patrones, Davidovich comenzaba cediendo su saque ante Vesely y volvía a ir cuesta arriba. No le costó tanto recuperar esta vez el break al malagueño que comenzaba a encontrarse y a centrar su cabeza en el partido. El checo seguía fuerte y sólido con su servicio y el set se encaminaba al tie-break. Fue ahí donde salió la genialidad de Foki, con algunos golpes imposibles que desconcertaron por completo a Vesely, primero tras un pelotazo donde devolvió todo el español y después con un globo imposible cuando el punto parecía completamente perdido para Davidovich.

El cuarto set comenzó con la diferencia de que Davidovich supo mantener su juego al principio pero estuvo muy sólido Vesely con su saque, muy sólido y seguro con su raqueta. En el octavo juego tuvo única bola de rotura el checo de todo el set y la aprovechó para romperle el servicio al malagueño –dispuso de tres bolas de break pero se fueron todas al limbo–.

El partido se iba a la quinta y decisiva quinta manga y Vesely mantenía el nivel al servicio mientras su rostro iba reflejando cada vez más el cansancio. Ya con el 1-1, en el tercer juego con Davidovich al saque se vivió un momento clave donde el checo tuvo numerosas bolas de break que fue respondiendo el malagueño con tino hasta que su rival logró derribar el muro para el break (2-1) tras casi un cuarto de hora de juego. Ya con el 3-1 en su bolsillo, Vesely pudo incluso ampliar con otro break pero el malagueño supo resistir e irse al 3-2. Fue ese otro momento clave en el partido, ya que Foki, alentado desde las gradas, logró romperle el servicio al checo en la primera oportunidad que tuvo para confirmar la rotura.

Ambos sostuvieron su saque en un final de partido dramático, con muchos nervios y un cansancio terrible para ambos tenistas. Llegaron al súper tie-break en el que tuvieron que tejer cada uno de nuevo sus nervios. Perdió Davidovich el primer saque y con primeros saques se puso por delante Vesely (3-0), ambos se mantenían firmes con sus saques yendo del 3-2 al 5-2 hasta que recuperó la comba el malagueño tras un minibreak (5-5) y lograba su primeras ventajas con su saque (6-7). El checo volvía arriba con su servicio (8-7) y el partido se le iba a Davidovich de una forma rocambolesca, a consecuencia de un warning que le daba el triunfo a Vesely con el 9-7 tras un pelotazo desproporcionado del malagueño.