Derrota 'made in NBA' (114-110)

Málaga/El Unicaja salió ayer del Palau tan endiosado como herido por sufrir, de manera cruel, su tercera derrota de la temporada después de protagonizar uno de los mejores partidos del curso. Por momentos, costó encontrar diferencias entre un partido NBA y el duelo que se vivió ayer en el Palau (114-110), el cuarto más anotador en la historia de la Liga. Quizá la hora y, sobre todo, la ausencia de televisión, al menos para unos aficionados malagueños que tuvieron que repartirse entre las escasas opciones que les daba internet para vibrar con un duelo sencillamente espectacular.

Como si de una tragedia griega se tratara, el equipo de Joan Plaza no paró de levantarse ante las adversidades que el destino iba poniéndoles por delante. Primero tocaba competir ante uno de los grandes de Europa tras el doloroso batacazo de Estambul, después llegó la ausencia de última hora de Granger. Markovic tendría que redoblar esfuerzos y Stefansson volver a tomar la dirección del equipo en momentos puntuales para dar descanso al serbio.

Sin el uruguayo, tocaba dar un paso al frente. Y, perfectamente acompañado por Golubovic, entre los dos se fabricaron los primeros 18 puntos cajistas. Ambos sostuvieron al equipo durante el primer cuarto ante las primeras pinceladas de lo que acabaría siendo toda una exhibición blaugrana desde el perímetro (20/34 para igualar el mejor registro de la ACB). Justo cuando Jackson amenazaba con el primer gran tirón del partido (25-18), dos triples de Green, que ayer dio motivos para la esperanza, reengancharon al equipo al final de los diez primeros minutos (27-24).

Cada vez que el marcador se apretaba, irrumpía algún jugador culé para apagar el incendio. Abrines, a la postre gran protagonista, sacó a relucir las cualidades que llamaron la atención de un equipo como el Barcelona. 11 puntos en apenas tres minutos lanzaron a los locales a una de sus máximas rentas (41-33). Suárez y Golubovic volvían a hacer la goma, pero los de Xavi Pascual estaban inspiradísimos desde el triple. 10/13 al descanso y 52-45 para tomar el camino de los vestuarios.

Green, Golubovic y Markovic seguían asumiendo galones en la resistencia, pero el equipo necesitaba la aparición de otras piezas importantes del puzle. Vasileiadis ponía 5 puntitos para la causa y el base serbio lograba igualar el partido mediado el tercer cuarto (59-59). La batalla ya estaba tomando tintes épicos. Xavi Pascual paraba el partido para ver cómo Suárez ponía por delante al Unicaja muchos minutos después (59-61). Aunque la alegría duró lo que tardó en anotar DeShaun Thomas su enésimo triple. El partido volvía a alejarse con el tercer cuarto tocando a su fin (74-69), hasta que Toolson hizo acto de presencia en el Palau. Dos puntos emborronaban su casillero hasta el minuto 28 de partido. En los 17 restantes, anotó 23 para llevar a los malagueños al borde del triunfo. Tres triples consecutivos apretaban el marcador antes de arrancar los diez últimos minutos en el Palau (79-78). Máxima expectación. El Unicaja había aguantado cada derechazo del Barça y se había plantado en el momento clave del choque con sus opciones de victoria intactas.

La solidez del líder estaba quedando más que patente. Y la imagen del equipo resurgía tras la fatídica noche del viernes en Estambul. El escolta de Arizona parecía dispuesto a salir indemne de Barcelona por tercera visita consecutiva. 14 puntos seguidos pusieron al Unicaja en órbita (79-83). Pero, una vez más, la artillería exterior que atesora Xavi Pascual en su roster devolvía a la vida a un equipo con un potencial extraordinario (89-85) a cinco minutos para el final. Para colmo, Markovic, principal sustento de los cajistas ayer, se iba al banco con cinco faltas. Tocaba acabar el partido sin un base natural a los mandos.

Y cuando el agua ya casi llegaba al cuello, emergió Fran Vázquez bajo el aro blaugrana para hundir un mal tiro de Stefansson. El pívot gallego encadenó varios minutos brillantes, forzando dos faltas en ataque a Tomic y poniendo por delante a los suyos a dos minutos del final. Huertas y Toolson intercambiaron canastas y la defensa brindó una oportunidad de oro para asaltar el Palau. Stefansson y Suárez a la línea. 3/4 tras el fallo del islandés y 3 segundos para que el Barça buscará una prórroga heroica.

Abrines la encontró con un triple de diez metros a tablero. Sublime. La orilla volvía a alejarse. Toolson la acercó en el tiempo extra (104-108), pero el apagón en los ataques finales y el insistente martilleo exterior culé acabaron decantando la balanza de un partido histórico al que le sobran los adjetivos. El Unicaja se mantuvo de pie en un duelo colosal, digno de cualquier final. Sobrados de casta para pelear donde sea y ante quien sea. Otro de sus avisos.

Ficha técnica:

114 - FC Barcelona (25+25+33+20+11): Huertas (19), Jackson (19), DeShaun Thomas (19), Doellman (16), Pleiss (2) -cinco inicial-, Tomic (5), Satoransky (7), Abrines (14), Hezonja (6), Nachbar (-) y Lampe (7).

110 - Unicaja (24+21+33+21+11): Markovic (17), Toolson (25), Suárez (10), Will Thomas (2), Golubovic (14) -cinco inicial-, Vázquez (4), Vasileiadis (5), Green (17), Stefansson (9) y Kuzminskas (7).

Árbitros: Jiménez, Perea, Manuel. Eliminados: Markovic (m.35) y Deshaun Thomas (m.40).

:Incidencias Encuentro correspondiente a la jornada décimo sexta de la Liga Endesa disputado en el Palau Balugrana de Barcelona ante 5.517 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por las víctimas de la masacre terrorista de París. En el intermedio del encuentro se realizó un acto de celebración por la victoria número 1.000 del Barcelona en la liga ACB.