Javi Gracia adelanta media permanencia

El navarro lleva en once jornadas los mismos puntos que sumó el equipo el año pasado en 20 Los que trabajan con él auguran una buena temporada

Javi Gracia se dirige a los suyos en el partido contra el Eibar.
Javi Gracia se dirige a los suyos en el partido contra el Eibar.
José L. Malo Málaga

10 de noviembre 2014 - 05:02

Desde el sábado por la noche, no se deja de hablar de la comparativa entre el Málaga de Javi Gracia y el de Manuel Pellegrini. Ningún otro técnico en la historia del club había logrado engarzar cinco victorias consecutivas, tan sólo el navarro y el chileno. Sólo nombrar al ahora técnico del Manchester City es recordar tantos y tantos buenos momentos; la historia del pamplonica se limita a diez partidos en el banquillo, pero ya ha comenzado a calar su trabajo, su mensaje y lo que está consiguiendo con esta joven plantilla. De hecho, durante al menos dos semanas será un equipo europeo, una rutina que con Pellegrini, y un plantel de mucho más lujo, llegó a ser más que habitual.

El dato es tremendo. Porque la comparativa con aquel Málaga de Champions sólo hace reflejar una tremenda descompensación entre los elementos que manejaba Pellegrini y los que tiene Javi Gracia, en un proyecto mucho más austero. De hecho, no sólo es sorprendente que los blanquiazules se hayan llevado los últimos 15 puntos en juego, sino que lo está haciendo con buen fútbol, con mucha presencia de canteranos y tan sólo teniendo a Rosales como uno de los habituales en el once de entre todos los fichajes que llegaron este verano.

Aunque las comparaciones sean odiosos, es más pertinente extender la comparativa al año pasado, en el que Bernd Schuster también manejó un grupo de presupuesto bajo y bajas en zonas importantes del plantel. Ese vistazo lleva a comprobar que la plantilla del entrenador alemán tardó 20 jornadas en lograr 21 puntos, los que suma el actual Málaga y que equivalen a la mitad de la permanencia virtual. Entonces, el equipo se situaba en la decimocuarta plaza, con cinco puntos de ventaja sobre el descenso y a 12 de las posiciones europeas, que son los mismos puntos en que aventaja el equipo de Gracia al Levante, último de los tres equipos que perdería la categoría ahora mismo.

De hecho, y aun sabiendo que la racha blanquiazul no durará eternamente, la actual progresión colocaría a los de Martiricos en posición europea al término del campeonato, lo cual supondría un objetivo que no estaba en la mente de los dirigentes a principios de la temporada, ni siquiera en la del entrenador, cuya prioridad era (y es) conseguir una permanencia sin muchas urgencias y así mejorar el papel del Málaga el año pasado y desquitarse de esa espina que se le quedó clavada tras el descenso con el Osasuna la pasada temporada.

Aunque ha llegado un punto en que el aficionado se ve con licencia para soñar. Ante el Rayo Vallecano la victoria llegó de manera contundente. Pero ante Granada y Eibar se superaron momentos difíciles y se logró revertir un resultado inicial en contra. El equipo empieza a mostrar hechuras de grupo sólido y se ve beneficiado por el hambre que están mostrando los jóvenes, Darder, Juanmi, Samu y Samu Castillejo, quienes le dan un punto más de competitividad a la plantilla.

También los colaboradores de Javi Gracia comienzan a ver que el trabajo del navarro no sólo tiene la recompensa de los resultados, sino que invita a pensar que cualquier cosa es posible. No sólo le están saliendo las cosas bien al preparador, sino que su grupo de trabajo cree firmemente en sus métodos y en lo que es capaz de hacer. Y él, a pesar de que otros miembros de su cuerpo de trabajo creen que se merece las mismas ovaciones que tributaban a Pellegrini, sigue sorprendido con tanta acogida. Tras su rueda de prensa ante el Eibar, un grupo de aficionados con pase VIP le tributó una ovación que le sorprendió sobremanera. Eso sí, su forma de pensar y de actuar no cambia. Ayer, de hecho, se fue al campo de la Federación a ver el encuentro que disputó el juvenil del Málaga contra el Cádiz en División de Honor.

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