Ochoa salva, Camacho y Recio ejecutan

Era consciente Ochoa de la oportunidad que se le presentaba tras la lesión de Kameni, y el mexicano no está decepcionando. Como ante el Sporting, volvió a resultar determinante. Mantuvo su portería a cero por segunda jornada consecutiva y esta vez tuvo mucho más trabajo que ante los rojiblancos.

Rubén Castro lo puso a prueba en varias ocasiones y Ochoa ganó la partida en todas ellas. Se mostró seguro en los balones aéreos y dio sensación de estabilidad a un equipo que supo aprovechar su oportunidad, tal y como lo está haciendo el mexicano bajo palos.

Apretaba el Betis y aguantaba el Málaga, que tras arrancar como un vendaval y toparse con dos manos milagrosas de Adán, tiró de recursos propios para sentenciar a un Betis que probó un poco de su propia medicina. El Málaga, que temía las acciones de estrategia del equipo de Merino, se aferró al guante de Recio y al bate de Camacho para sacar tres puntos de oro.

El malagueño acumula asistencias al ritmo que se convierte en un auténtico especialista de estas lides. Especialista que tiene en Camacho al socio ideal. El maño, que volvía tras sanción, se guisó y se comió la falta que derivó en el gol.

Todo ello, bien condimentado con la solidez defensiva que es ya el sello de este Málaga.