Scariolo y 10.000 amigos

El mejor entrenador de la historia del Unicaja se sienta hoy en el banquillo local del Martín Carpena. Lo hace al frente de la selección española. Tres títulos europeos y una plata olímpica conforman el palmarés de Sergio Scariolo al frente de España. Tras dos décadas en el país, con esposa e hijos españoles y residente en Málaga, se siente uno más. Aún no es público su futuro tras los Juegos, pero quiere rubricar su posible adiós a la selección con otra chapa olímpica.

No está siendo una concentración balsámica para la selección. Scariolo se hace ya a la idea de que la presencia de Marc Gasol en Río se aleja. "Esperamos una decisión definitiva, Memphis es quien tiene la voz decisiva. Se mantiene un mínimo de esperanza, pero más pequeña respecto a días atrás. Marc está en Barcelona trabajando su recuperación. No hay límites, pero son días definitivos", asegura el seleccionador, que también espera que el otro Gasol, Pau, esté disponible cuanto antes: "La NBA debe enviar la póliza para que la Federación pueda pagar. El boli y la chequera están en la mano, pero hasta que la NBA no envíe las condiciones definitivas, ha habido un cambio de contrato, no se puede firmar. Además de que para el público de Málaga sería un aliciente más, necesitamos empezar a tener oxígeno y una identidad. Está fuera Álex Abrines, también Pau... Al margen de los problemas físicos, asumibles porque otros equipos también los tienen, estamos teniendo una sucesión de problemas burocráticos por todos estos cambios de equipo. A pesar de ellos, estoy muy contento por la disponibilidad y rendimiento del equipo. Pero hay que progresar y dar pasos adelante que no pudimos dar aún. Para llegar al objetivo deseamos una semana de preparación diferente y que las dos que quedan haya más tranquilidad para trabajar con todos al completo. Esperamos recuperar a Ricky respecto a Kaunas. Ojalá podamos dar otro paso adelante y tener esa misma tónica muy buena de Lituania".

Scariolo recordó que su vinculación a Málaga trasciende a lo profesional. "En la grada estarán 10.000 amigos, con tu familia y amigos más cercanos. Es un placer y orgullo sentirme tan querido y tan respetado en esta ciudad, al margen de porque vivo aquí por los recuerdos que nos unen, que son irrompibles", aseguró el técnico italiano, que fue cuestionado por la evolución del canterano cajista Domantas Sabonis, que el pasado lunes hizo mucho daño a su equipo. Antes tuvo que soportar a su padre, Arvydas, y ahora padece a su tercer vástago. "Me ha impresionado. Le vi antes por televisión, pero competir en directo es distinto. Tiene unas condiciones físicas impresionantes, una agresividad importante y una gran inteligencia. Ha mejorado el tiro exterior, de media distancia. Me parece un jugador con pleno derecho a estar donde va a estar, en la NBA", decía sobre Domas.

Como hombre de baloncesto, Scariolo también respondió a cuestiones más generales, como la salvaje irrupción de la NBA en el mercado europeo. "No hay marcha atrás y puede que haya una aceleración. Es una tarea de todos, clubes, entrenadores y directivos, adecuarse a la nueva realidad. Hay que realizar fichajes imaginativos y, esencialmente, hay que producir jugadores. Hay que dedicar más dinero, recursos, atención y pasión a la producción de jugadores. Al menos podemos aprovecharlos un tiempo y generar más identificación. Ante el éxodo, que cada vez será más inmediato, tenemos que crear una cantidad más amplia de jugadores, no sólo en España sino en Europa", razonaba Scariolo, que mandaba su mensaje de apoyo al Baloncesto Sevilla.

Por último, Scariolo reconoció el trabajo del malagueño Ángel Sánchez-Cañete, miembro de su cuerpo técnico y que lo fuera también en su Unicaja campeón. "Tiene mucho conocimiento del baloncesto, de los jugadores y la filosofía de los entrenadores, colectivas e individuales. Tiene la capacidad de resolver problemas con sencillez y naturalidad, que todos los que hemos tenido han sido duros. Y, por supuesto, una calidad de trabajo en lo suyo, la tecnología y seguimiento de jugadores, que le conocía y que ahora he refrescado", remató.