Otra exhibición del DKV de Ricky
LA vigésimo tercera jornada de la Liga ACB se desarrolló dentro de la lógica, no habiendo que destacar grandes sorpresas. Real Madrid y DKV Joventut siguen postulándose, tanto por juego como por resultados y regularidad, como los grandes favoritos para aspirar a grandes logros en lo que resta de temporada.
El partido más destacado se disputó en el pabellón de La Casilla de Bilbao, donde se enfrentaban el equipo revelación de la temporada, el iurbentia Bilbao, y el flamante campeón de Copa, el DKV Joventut. Victoria final de los visitantes, que se impusieron no sin pasar ciertas dificultades. Los locales nunca desfallecieron en el intento y con el constante empuje de sus dos bases, Huertas y Salgado, lo intentaron pero tuvieron que ceder ante el mayor potencial del rival.
Las bajas de Recker y Rancik están pesando demasiado en un equipo que, a pesar de todo, viene completando una gran temporada. Por su pabellón deben pasar en esta segunda vuelta la mayoría de los grandes (Real Madrid, Barcelona, Tau, Unicaja) y será en estos choques dónde se verá hasta dónde pueden llegar las aspiraciones del equipo bilbaíno. Los jugadores entrenados por Aito García Reneses impusieron desde el principio un ritmo elevado de juego basado en una defensa agresiva y en contraataques ejecutados con una gran eficacia y rapidez.
Ricky Rubio, un ejemplo
Punto y aparte merece la actuación de Ricky Rubio, que una vez más dio muestras de una gran madurez y personalidad sobre la cancha. Anotó, defendió, reboteó, robó balones y, en determinados momentos, mantuvo un gran duelo con su ex compañero, Marcelino Huertas. Ha llegado un momento en los que se agotan los calificativos para expresar lo que está haciendo sobre el parqué este joven de 18 años. Parece como si llevara una década en la Liga ACB. El mérito es indudablemente suyo, pero es de justos reconocer la apuesta que hizo en su día Aito. Los frutos los está recogiendo ahora pero atrás han quedado sus inicios, en los que más de uno pensaba que se trataba de una frivolidad o de intentar justificar con la apuesta por los jóvenes el hecho de no conseguir grandes resultados.
Ningún entrenador de élite europeo se hubiera atrevido a hacer debutar a un niño de 15 años en la mejor liga de baloncesto del mundo después de la NBA. Lo que está sucediendo con Ricky me lleva a hacer la siguiente reflexión: ¿Cuántos jugadores hay en la actualidad en la cantera de clubes importantes que podrían tener un hueco en os primeros equipos? Creo que encontraríamos varios de ellos que sólo necesitan confianza y una buena formación tanto personal como deportiva para llegar a ser futuribles de nuestra liga. Cuando estaba en categoría junior, Javier Imbroda me dio la oportunidad de debutar y posteriormente jugar con asiduidad en la Liga ACB con el Mayoral Maristas. Quizás por este motivo siempre me he sentido cercano y accesible para los jóvenes jugadores.
Otro atractivo Unicaja-Barça
La Euroliga disputa esta semana su cuarta jornada, donde los equipos españoles jugarán partidos claves para su pase a los cuartos de final. Lo importante es que una semana más las posibilidades de los cuatro clubes de nuestro país siguen intactas.
Entre los choques de los nuestros destaca por encima de todos el duelo fraticida que disputarán Unicaja y Barcelona. El vencedor del choque habrá dado un paso de gigante para asegurarse la clasificación. La poca diferencia del partido disputado en el Palau (dos puntos) da mucha más trascendencia al resultado de mañana. Se trata de una final más en la que se ven inmersos estos dos grandes clubes. El factor cancha (como se está demostrando en este Top 16) puede volver a ser determinante. La superioridad que suele demostrar cada semana el conjunto malagueño en su juego interior puede quedar contrarrestada con los kilos y centímetros de los jugadores catalanes, aunque la versatilidad de Haislip (capaz de anotar desde 6,25 y jugar en el poste bajo) puede hacer mucho daño.
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