Locura por las entradas para el adiós a Rafa Nadal en Málaga: La reventa pone a 2.400 euros localidades que valían 60

El Carpena se quedará muy pequeño para ver la despedida del tenis profesional de Rafa Nadal. El aforo habitual de los partidos de baloncesto del Unicaja es 10.600 espectadores, pero la distribución de las localidades cambia con el tenis, que hacen más pequeña la capacidad del Palacio. La utilización de palcos en los dos fondos resta potencial afluencia, es idiosincrasia del tenis. La fiebre por las entradas ya estaba desde tiempo atrás, el ritmo de venta de los abonos era superior al de ediciones anteriores. Cuando se pusieron a la venta las entradas de cada sesión individual, una vez se supo qué día concreto jugaban los equipos, volaron las del día 19 de noviembre, la de apertura, que enfrenta a España con Países Bajos desde las 17:00 horas (es posible que sea más tarde porque previamente hay una semifinal de la Billie Jean King Cup femenina, que se jugará de manera paralela). No hay entradas desde entonces... en la página oficial de la Copa Davis.

Con dinero casi todo se puede comprar. Y la reventa ya funciona a todo vapor para poder asistir a esa eliminatoria. Los precios oficiales iban desde los 40 euros, que volaron rápidamente, así como progresivamente las categorías (60, 80, 100...) hasta los 525 de las gradas VIP sólo para esa jornada de martes. En páginas especializadas en la venta de entradas para acontecimientos deportivos y musicales se podía ver cómo localidades que estaban en 60 euros de manera original se vendían por 2.400 euros. Otras de 80 por 3.600. No se podía encontrar una por menos de 1.500 euros en todo el Carpena por esta vía. Después también la reventa fuera de internet y redes, que se agudizará conforme llegue la fecha del partido, el primero y los sucesivos si España sigue avanzando en la competición.

Curiosamente, en la primera década del siglo estaba proyectada una ampliación del Carpena hasta 13.000 espectadores para acoger eventos como la Copa Davis, que entonces, en el formato clásico de eliminatorias con un anfitrión y tres días y cinco partidos al mejor de cinco sets. La exigencia entonces era mayor, sobre los 12.000. Con el cambio desde 2019 ya se rebajaron las peticiones de aforo y Málaga pudo entrar en ese círculo de tener acceso a un evento que sigue teniendo su demanda aunque tenga sus detractores. Sucede que un impacto como la retirada de uno de los mejores deportistas de la historia lo va a convertir en un evento planetario que hace que las peticiones se disparen. Por ejempo, la zona de prensa es la misma que para los partidos del Unicaja, a diferencia de cuando hay una Copa del Rey, que es más extensa. También las acreditaciones van a estar caras.

Las entradas para semifinales (viernes y sábado) y final (domingo) también están agotadas, sólo quedan para los otros tres cuartos de final, que medirán a Alemania-Canadá (hipotético rival en semifinales de España), Italia-Argentina y Estados Unidos-Australia.