María de Valdés, tras los Juegos Olímpicos: "Salgo enfadada y decepcionada conmigo misma"

"Pido perdón. A veces los nervios, un mal día o incluso un escenario que no controlas puede dejar una mala pasada pero esto no nos define ni como deportista ni como persona", se confiesa la malagueña

Se toma un periodo de reflexión

Así fue su plata mundial

María de Valdés, en París. / Efe

10 de agosto 2024 - 11:38

No fue la participación soñada por María de Valdés en los Juegos Olímpicos de París'24. Llegó a los 26 años a su gran cita con el bagaje de haber sido subcampeona del mundo en febrero pasado. La presión de la cita universal es muy alta y De Valdés admitía que no la ha gestionado bien y que ha estado lejos de ofrecer su mejor versión. "Yo creo que es la carrera más complicada que he hecho en toda mi trayectoria deportiva. La ida teníamos la corriente a favor y era sencillo, pero en la vuela teníamos que ir rozando prácticamente rozando la pared, porque si te ibas un poco más hacia el centro te ibas atrás con la corriente", explicó la malagueña tras acabar una carrera en la que acabó en 17ª posición.

Con más horas de reflexión compartía De Valdés sus pensamientos a través de las redes sociales. "Acaba de terminar el sueño olímpico que había luchado durante tanto tiempo… Tengo que ser sincera y no solo era venir aquí y competir, sino dar mi máximo nivel y salir orgullosa de mi carrera y no ha sido así. Salgo decepcionada y enfadada conmigo misma por no haber podido dar mi mejor versión ni el rendimiento que todo el mundo esperaba y pido perdón. A veces los nervios, un mal día o incluso un escenario que no controlas puede dejar una mala pasada pero esto no nos define ni como deportista ni como persona", decía la malagueña, que quería "agradecer a todo el mundo que ha estado a mi lado apoyándome y mandándome mensajes de ánimo. Siento no responder ahora pero voy a estar unos días desconectada de whatsapp y redes sociales. Necesito reflexionar y saber afrontar todo lo que ha pasado este año, tanto de las cosas buenas como de las malas".

La malagueña tenía un recuerdo para su padre, fallecido meses antes de la celebración de los Juegos Olímpicos: "Gracias papá por guiarme y darme fuerza cuando más le he necesitado, te echo de menos". Momentos, pues, para madurar qué ha fallado para De Valdés, que se hizo acreedora a tener una buena oportunidad de hacer algo grande en París, pero acabó devorada en el Sena.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último