Series Mundiales de triatlón: Torremolinos corona un podio olímpico

Torremolinos/Torremolinos clausuró las finales de las Series Mundiales con un emocionante espectáculo en torno a la zona de Los Álamos. Sobre la distancia olímpica (1.500 metros de nado, 40 kilómetros en bicicleta y 10 de carrera a pie), los mejores triatletas del mundo se exprimían en la última prueba de la temporada, con el título mundial en juego. El trío que ocupó el podio en Torremolinos fue el que subió a París y el que ocupa la general. La prueba la conquistó el neozelandés Hayden Wilde, con el francés Leo Bergere y el inglés Alex Yee, el campeón olímpico, detrás. Yee-Bergere-Wilde fue el orden en la general. No fue el día del malagueño Alberto González, que con argumentos por sus resultados recientes soñaba con hacer algo grande en casa, en la playa donde pasaba días de su infancia. Acabó en el puesto 19. 

Miles de espectadores contemplaban la prueba en el centro neurálgico de estas Series Mundiales, que han ofrecido un gran espectáculo deportivo de una disciplina que en pocas décadas se ha convertido en troncal en los Juegos Olímpicos aunque quedaran las tragedias de dos vidas perdidas de dos atletas veteranos y también las quejas vecinales por los atascos de tráfico en este largo fin de semana. Torremolinos, no obstante, ha lucido su escaparate ante varios miles de visitantes in situ y a través de las redes. Sostienen las autoridades que es el tipo de target de turista que interesa.

El segmento de natación, que se desarrollaba con dos vueltas a un circuito de 750 metros en las aguas de Los Álamos, comenzó lideraba por el australiano Matthew Hauser, uno de los favoritos. Alberto González asomaba por la cabeza en los primeros compases, pero quedaba enredado entre brazos y piernas de sus contrincantes y caía al puesto 17 en el primer paso por meta, aunque a 10 segundos de la cabeza. En la transición a la bicicleta pasaba González en el puesto 30, a una veintena de segundos. 

En el inicio de la bicicleta se formaba una escapada, tras una caída, de cinco corredores potentes, los franceses Leo Bergere y Vincent Luis, los neozelandeses Tayler Reid y Hayden Wilde y el suizo Simon Westermann con González en el segundo pelotón. Eran ocho vueltas de cinco kilómetros a un circuito plano pero revirado que no daba mucho respiro y en la fuga había entendimiento con corredores que compartían nacionalidad y las ideas claras. 20 segundos en el primer paso por meta, 30 en el segundo, 38 en el tercero… por detrás tiraban americanos y británicos, también el español Baxter mientras el malagueño recuperaba al final del pelotón. Al final del ciclismo la diferencia era ya de casi dos minutos. Wilde y Bergere optaban al título si el campeón olímpico, Alex Yee, quedaba más allá del sexto puesto. Así que se disputaban dos carreras a la vez, por Torremolinos y por el Mundial.

Una vez en la carrera a pie, cuatro vueltas de 2.5 kilómetros por el Paseo Marítimo, Wilde y Bergere rompían la cabeza. Por detrás, Yee ganaba su carrera desde el inicio, el campeón olímpico marca las diferencias en el segmento definitivo. Alberto González intentaba no perder el contacto con el pelotón perseguidor, donde se rifaban las demás plazas de honor, pero no le daba, no era su mejor día tras una temporada fantástica en la que estuvo muchos meses cerca de su pico.

Era un espectáculo ver cómo Yee iba recuperando distancias al trío que quedaba de la fuga y los superó para subir al podio. Wilde se marchaba con claridad, con Bergere en un segundo lugar que le valía la plata mundial, al neozelandés le faltaban unos puntos. Así acababa la prueba tras una hora y casi tres cuartos de máxima intensidad, con el malagueño Alberto González en el puesto 19. Un top 20 que a comienzos de temporada hubiera sido magnífico, tal es el salto competitivo que ha dado en 2024.