Cofides prevé unas 30 empresas andaluzas candidatas al fondo de recapitalización

Sevilla/El fondo de recapitalización de empresas afectadas por el Covid es un instrumento financiero creado por el Gobierno de España para ayudar a empresas de mediano tamaño que estén en dificultades por efecto de la pandemia, pero tengan posibilidades de sobrevivir mediante el reforzamiento de su capital.

Dotado con mil millones de euros de fondos propios del Estado, la gestión del fondo de recapitalización le ha sido encomendada a Cofides, empresa pública de capital mixto –el 53% pertenece al Estado y el 47% a la gran banca– que en origen se constituyó para financiar la salida al exterior de compañías españolas y que también ayuda a financiar empresas donde opera la Agencia de Cooperación Internacional para el Desarrollo.

Con motivo de la pandemia, Cofides cambió sus estatutos para permitir la financiación de empresas en España, precisamente una vez que el Gobierno le encomendó la puesta en marcha y la gestión del fondo. “Nuestro objetivo con el fondo de recapitalización es reconstituir el capital de empresas de mediano tamaño que se han visto afectadas por el Covid-19 y ayudar a que se recuperen cuantas más, mejor”, afirma José Luis Curbelo (Bilbao, 1955), presidente de Cofides en declaraciones a este periódico, durante una visita a Sevilla para dar a conocer el nuevo instrumento financiero.

El fondo está dirigido a empresas que en 2019 tenían una cifra de negocio de entre 15 y 400 millones de euros, que hayan perdido al menos el 20% de su facturación en 2020 por efecto de la pandemia y que, pese al impacto sufrido, cuenten con un plan de negocio que permita vislumbrar la viabilidad a medio y largo plazo.

“En España hay unas 14.000 empresas de este tamaño y las estimaciones que tenemos es que un 8% de ellas son potenciales candidatas a acogerse a este fondo”, explicar Curbelo, al cumplir esas condiciones, lo que las reduce a unas 1.300 empresas. En Andalucía radican un 8% de esas 14.000 firmas, y la estimación de Cofides es que entre 30 y 40 compañías de la comunidad podrían acceder a esta recapitalización.

Salvar el máximo posible de estas empresas es una prioridad, porque estas empresas son el 0,4% del tejido productivo pero generan más de tres millones de empleos.

El fondo está destinado a todos los sectores, salvo el financiero, y quedan excluidas las compañías que estén en concurso de acreedores, salvo que estén en fase de convenio. Cada empresa podrá optar a una refinanciación de entre 4 y 25 millones, si son empresas de mediano tamaño, o de entre 3 y 15 millones si cumplen la definición de Pyme de la Unión Europea. El dinero no podrá usarse para repagar deuda. Se trata de una financiación de último recurso, cuando se la niega el sector financiero. La recapitalización podrá hacerse con inversiones en el capital, aunque el objetivo es que la mayoría de las operaciones se ejecuten mediante préstamos participativos a ocho años, con condiciones de financiación crecientes –que irán de euríbor más dos a euríbor más 8–, porque el objetivo es que en cuanto sea posible se financien en el mercado financiero.

Curbelo enfatizó que el proceso, abierto desde el 30 de junio al 31 de diciembre, será muy transparente y atendiendo siempre a criterios técnicos.