Carromero sale de la cárcel
Instituciones Penitenciarias avala la propuesta de la cárcel de Segovia, al considerar que cumple todos los requisitos para acceder al tercer grado. El dirigente de NNGG agradece la "atención" recibida.
El dirigente de Nuevas Generaciones Ángel Carromero ha salido este viernes de la cárcel de Segovia en régimen de semilibertad y ha vuelto a su domicilio seis meses después del accidente de tráfico que costó la vida en Cuba a dos opositores y por el que fue condenado a cuatro años de cárcel. Después de que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias avalara la propuesta de la Junta de Tratamiento de la cárcel de Segovia para que se le concediera el tercer grado o régimen abierto, Carromero ha dejado esa prisión a las 18:10 y ha partido hacia su domicilio en Madrid a bordo de un automóvil. Le esperaban a la salida del centro penitenciario dos amigos, con los que ha viajado a la capital. "Gracias por la atención" son las únicas palabras que ha pronunciado Carromero tras cruzar la puerta del edificio de visitas, por el que ha salido, dirigiéndose a una treintena de periodistas y cámaras apostados enfrente.
A la prisión de Segovia llegó el pasado día 29 de diciembre desde Cuba, donde fue condenado por homicidio imprudente tras sufrir un accidente de tráfico el 21 de julio en el que murieron los disidentes cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero. Gracias a la aplicación del convenio bilateral de ejecución de sentencias penales que España y Cuba mantienen desde 1998 y que establece que las penas impuestas en el país caribeño a españoles podrán ser cumplidas en centros penitenciarios de nuestro país, Carromero pudo ser trasladado a nuestro país. Según la liquidación de la condena que dictó la Audiencia Nacional, de los cuatro años que se le impusieron a Carromero en la isla caribeña ya había cumplido en la isla 159 días. Por tanto, de los 1.460 días de pena le quedaban por cumplir en España 1.301, aunque en la cárcel de Segovia ha dormido ya trece días. La condena, según esos cálculos, se cumpliría el 21 de julio de 2016.
La legislación española permite que puedan acceder al tercer grado o régimen abierto a los condenados a menos de cinco años, pero deben reunir unos requisitos que la Junta de Tratamiento ha de tener en cuenta a la hora de proponer su clasificación. En este caso, el tipo de delito, el arraigo familiar de Carromero, la posibilidad de mantener un puesto de trabajo y su propia conducta son algunas de las circunstancias que han permitido al dirigente de Nuevas Generaciones del PP beneficiarse del régimen de semilibertad. De hecho, el Ayuntamiento de Madrid ya anunció que si obtenía el tercer grado el recluso podría ejercer como asesor técnico en la Junta de distrito del barrio de Moratalaz, donde según el PSOE cobra 53.000 euros anuales. También seguirá pendiente del negocio familiar -un gimnasio propiedad de su madre- y de su labor en Nuevas Generaciones, pero primero tendrá que presentarse, el lunes por la mañana, en un Centro de Inserción Social (CIS) de Madrid.
Atrás quedan los cinco meses de reclusión en 100 y Aldabó, un centro del Ministerio de Interior cubano ubicado en las afueras de La Habana. Carromero, que cuenta con numerosos antecedentes de infracciones de tráfico en España, circulaba el día del accidente con exceso de velocidad por un tramo de carretera en obras en Cuba, perdió el control del vehículo que conducía, frenó, derrapó y chocó contra un árbol. Murieron en el siniestro los opositores cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero, que no llevaban puesto el cinturón de seguridad, mientras que él y su homólogo sueco Jens Aron Moding resultaron ilesos.
Tras ser condenado por la Justicia cubana a cuatro años de prisión por homicidio imprudente, el Gobierno español alcanzó un acuerdo con Cuba el pasado 13 de diciembre para que Carromero pudiera terminar de cumplir la pena en España y un día después autorizó su repatriación. "Emprendedor", "trabajador" y "muy comprometido" son algunas de las expresiones que utilizan sus allegados para definir a este joven de 27 años que entró pronto en política. Sus conocidos le definen también como un joven "defensor de las libertades y la democracia". Dentro de sus inquietudes también estaba la situación en Cuba y, por eso, viajó a ese país para conocer a miembros del Movimiento Cristiano de Liberación, una iniciativa "personal" en la que no actuaba como emisario de su partido, según recalcan fuentes populares.
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