Continúan los controles y registros policiales en Melilla por el fraude electoral

El aeropuerto, el puerto y el paso fronterizo de Melilla con Marruecos cuentan con presencia policial dedicada todavía hoy a controlar y llevar a cabo registros masivos sobre la salida de posibles votos por correo. A pesar de que la Junta Electoral Central (JEZ) ha ordenado la entrega del DNI a toda persona que emita su papeleta a través de este sistema para la ciudad autónoma, fuentes de la Delegación del Gobierno aseguran que el dispositivo no se ha replegado.

Reconocen que a raíz de la resolución esta vigilancia e inspección "tiene menos sentido", ya que el propósito con el incremento de efectivos de la Guardia Civil, así como de la Policía Nacional tanto en el exterior como en el interior de la oficina de Correos de la ciudad, era evitar la salida de sacas de votos que luego pudieran ser entregadas en otros puntos de la península. Si bien, insisten en que "no se van a retirar" hasta el próximo jueves 25 de mayo, día en que finaliza el plazo disponible para entregar el voto por correo.

Y es que, de lo trascendido hasta ahora, se sospecha que se trata del intento de mayor fraude electoral de la democracia. De momento, "decenas" de personas estarían siendo investigadas por la Policía Nacional como sospechosos por su presunta implicación en la captación de votos por correo, tal y como ha informado El País. El Juzgado de Instrucción número 2 de Melilla asumió las diligencias previas del caso a instancias de los investigadores.

Las colas de Correros, que daban la vuelta a la manzana, este viernes se encontraban prácticamente vacías; mientras que los carteros hacían el reparto escoltados por furgones de Policía Nacional. Comidillas que comentan lo sucedido en bares, quioscos o parques. Este es el ambiente, algo espeso, que se respiraba en Melilla después de que el supuesto negocio relacionado con la compra de votos por correos estallara. Con apenas 85.000 ciudadanos, la ciudad autónoma ha registrado más de 11.70 peticiones de votos, lo que representa un 21, 21% del censo frente al 3,05% a nivel nacional. Un dato que hizo saltar todas las alarmas. Autoridades policiales y judiciales ya investigan lo sucedido.

Hace cuatro años la sorpresa saltó a última hora. Una inesperada coalición entre PSOE, Coalición por Melilla y el único representante de Ciudadanos, Eduardo de Castro, le otorgó a este último la presidencia frente al favorito, el popular Juan José Imbroda. Entre gritos de traidor culminaban 19 años de gobierno en la ciudad autónoma. Imbroda repite como candidato. "Iremos a todos los barrios aunque Mustafá Aberchan nos mande a sus sicarios para reventar algunas de las actuaciones que convocamos", aseguraba el dirigente popular a finales de abril, en plena precampaña en la que también arremetía contra el PSOE por amaños en las urnas.

Aberchán es el líder de Coalición por Melilla. En febrero de 2021, el Tribunal Supremo confirmaba la condena dictada por la Audiencia Provincial de Málaga tres años antes por la teórica compra de votos por correo en las elecciones al Senado en 2008. Dos años de cárcel e inhabilitación para él y para el ex secretario general del PSOE en Melilla DionisioMuñoz por dos delitos electorales y uno de falsedad.

Las dos fuerzas políticas habían concurrido en coalición a la Cámara Alta. La Justicia consideró probado que las organizaciones idearon un sistema para convencer a ciudadanos para que pidieran ese voto por anticipado y les entregaran a ella los sobres en los que introducían la papeleta común que depositaban en Correos, gracias a sus "contactos". A los votantes les prometían un contrato en los planes de empleo de la delegación del Gobierno. Llueve sobre mojado en Melilla.