Encuesta electoral: el PSOE obtendría una ventaja más insuficiente

Las elecciones generales del 10 de noviembre no tienen por qué aportar un resultado más claro que las de abril. Según el Barómetro de Ipsos para este diario, la nueva convocatoria empeoraría aún más la situación, porque el PSOE de Pedro Sánchez seguiría necesitando a diputados independentistas, además de los de Unidas Podemos, y no sumaría con Ciudadanos. La suma de PP, Ciudadanos y Vox tampoco llegaría a la mayoría absoluta de los 176 escaños, por lo que sólo un pacto a varias bandas podría impedir que se repitiesen las elecciones. La única combinación de dos partidos que serviría sería la del PSOE y PP.

Ipsos realizó el trabajo de campo entre el 18 y el 20 de septiembre, justo cuando se conoció que la última ronda de partidos con el Rey no había sido fructífera. Se ha entrevistado a 1.837 personas en edad de votar. Hoy lunes se agota el plazo constitucional para la elección de un presidente de Gobierno. Por lo que, sin acuerdo, las generales se fijarán el 10 de noviembre, serán las cuartas elecciones que se celebran en España en el plazo de cuatro años.

Descenso socialista

Según el barómetro, el PSOE de Pedro Sánchez volvería a ser la fuerza más votada, pero perdería apoyos respecto a abril. Con una horquilla de escaños de entre 117 y 121 diputados, el PSOE se queda con una estimación de voto del 28%, siete décimas menos que en las anteriores y con dos o seis escaños menos. Este resultado, insuficiente, puede estar relacionado con el señalamiento mayoritario que se hace a Pedro Sánchez como responsable de la repetición.

Durante estos dos meses, se ha intentado, primero, un Gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos, y más tarde un Gobierno socialista con apoyo extern

o del partido de Pablo Iglesias. En ambos casos era necesario, además, el respaldo de ERC más el del PNV.

El gran beneficiario de la convocatoria electoral sería el PP de Pablo Casado. Los populares obtuvieron el peor resultado de su historia en abril, y ahora podrían mejorar bastante, pero de un modo insuficiente para alcanzar un pacto a la andaluza, con el apoyo de Ciudadanos y de Vox. Casado sacaría de 79 a 83 diputados, cuando ahora cuenta con 66, es un tremendo incremento de entre 13 a 17 escaños. El porcentaje que le estima Ipsos es del 19,8%, dos puntos más que en abril.

Subida de Unidas Podemos

Unidas Podemos, de Pablo Iglesias, se convertiría en la tercera fuerza del Congreso, porque gana nueve décimas en intención de voto, y se coloca en el 15,2%. Esto le permitiría sacar entre 41 y 45 escaños; ahora cuenta con 42. El problema con el que se encontraría Pedro Sánchez es que Unidas Podemos no le basta para sacar adelante una investidura con este resultado. El socialista necesitaría al PNV y, lo que es peor para él, a ERC. Esto es lo que ha complicado mucho el pacto en esta ocasión.

Con esa relación de resultados, Sánchez tendría que aceptar la coalición que propone Iglesias y, además, buscar el apoyo de los independentistas. Se trataría de una combinación muy difícil de sacar, si se considera que la sentencia del Procés saldrá antes d ela tercera semana de octubre.

La encuesta de Ipsos no ha considerado la posible irrupción de un partido encabezado por Íñigo Errejón, que extienda la fórmula de Más Madrid a esta provincia y a algunas otras.

El partido de Albert Rivera, Ciudadanos, es es de los más perjudicados. Perdería cinco u ocho diputados, y se quedaría en una horquilla de entre 49 a 52 escaños. El porcentaje que le da Ipsos es del 14,2%. Sería la primera vez que el partido naranja cayese en unas elecciones tras su irrupción en la política nacional. Esta bajada de apoyos le quita a Ciudadanos la posibilidad de pacto con los socialistas, en noviembre no sumaría con Pedro Sánchez. Aunque Rivera se ha negado a esta coalición, los últimos días de la fallida legislatura movió su rotunda negativa al ofrecer una abstención.

Tampoco sumarían los tres partidos de la derecha. Vox apenas se mueve del resultado obtenido en abril de 2019. Ganaría entre 20 y 23 diputados, uno menos que en la actualidad. El partido de Santiago Abascal obtiene un apoyo del 9,8%, cinco décimas menos.

El escenario en el resto del Congreso es muy similar. Los independentistas catalanes de ERC tendrían entre 13 y 15 escaños, ahora tiene 15, y el PNV mantiene los seis. Lo mismo que Junts per Catalunya, la lista de Carles Puigdemont.