Visto y Oído
Carmen Machi
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, reconoció ayer que al Ejecutivo le preocuparía "muchísimo" que en las próximas elecciones vascas, convocadas para el 21 de octubre, ganara un proyecto de carácter independentista.
Así lo manifestó la vicepresidenta en una conversación informal con los periodistas tras visitar las instalaciones del BOE y al ser preguntada por la posibilidad de que en los comicios vascos, que el martes anticipó el lehendakari, Patxi López, venciera una candidatura independentista.
Según Sáenz de Santamaría, esa posibilidad supondría una inestabilidad política, que, además, se sumaría a los problemas económicos del país.
En opinión de la vicepresidenta, lo mejor para el País Vasco es un proyecto de estabilidad porque contribuiría a una mayor confianza económica.
Sobre la posibilidad de que el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, adelante también los comicios en su comunidad para que no haya dos campañas electorales seguidas, la vicepresidenta dejó claro que el Gobierno no debe ni puede opinar al respecto para no condicionar las decisiones de los presidentes autonómicos.
Por su parte, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, dijo ayer que el principal riesgo que se afrontará en las próximas elecciones vascas es que PNV y EH Bildu saquen muchos escaños y se unan "en el tren hacia la independencia", algo que "sólo el PP puede evitar".
Basagoiti anunció que el presidente Mariano Rajoy se volcará en las elecciones vascas, visitando Euskadi varias veces. "Hablé el martes con él y es consciente de la importancia de estas elecciones, no de que el PP tenga un escaño más o menos, sino por la propia tranquilidad y convivencia del País Vasco en el conjunto de España, y se va a volcar".
"Quiero contar con Rajoy en los grandes actos de la campaña: no le escondo, a diferencia de lo que hizo el PSOE con Zapatero al final, porque en el País Vasco también puede calar un mensaje de responsabilidad ante la crisis", agregó Basagoiti.
El vicesecretario general de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons, cree que algo debió de hacer mal el lehendakari, Patxi López, para dejar una "situación dulce" para los partidos nacionalistas de cara a las próximas elecciones vascas.
González Pons se expresó así, en declaraciones a la cadena Ser, un día después de que López anunciara un adelanto de las elecciones vascas y al ser preguntado por este hecho y por los sondeos que apuntan a un escenario más favorable para los nacionalistas en las elecciones.
Sobre el adelanto electoral, González Pons dijo que Patxi López no tenía otra opción que convocar elecciones porque era "muy difícil", en las actuales circunstancias, llevar adelante un gobierno sin apoyos en el Parlamento vasco.
En su opinión, la política que llevó a cabo el lehendakari en los últimos meses se basó en "no tomar decisiones difíciles" para hacer oposición a Mariano Rajoy, lo que le situó en este caso "ante una contradicción". Ante esta situación, "ni tenía apoyos ni los números le iban a salir para poder hacer los presupuestos que tanto dijo que debía hacer, así que no tenía más alternativa que convocar elecciones para que se celebren antes de la elaboración de los presupuestos", aseveró. Para el dirigente popular, lo peor de la gestión del PSOE es que "algo ha tenido que hacer mal" porque ha dejado en una "situación de dulce" a los partidos nacionalistas.
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