Mas afirma que el objetivo es la consulta "definitiva" y no unas elecciones

El presidente catalán, Artur Mas, ha dicho que no tiene miedo a la Fiscalía y ha propuesto a Mariano Rajoy entablar un "diálogo permanente" para acordar una "consulta definitiva" que, si no hay acuerdo, se haría a través de unas plebiscitarias, aunque ha enfriado la posibilidad de un avance electoral inmediato. Dos días después del 9-N, el presidente catalán ha comparecido ante los medios de comunicación, en un momento en el que la Fiscalía Superior de Cataluña prepara una querella contra el propio Mas y tres consejeros de su gobierno por supuestas responsabilidades penales en el proceso participativo.

"Esto no lo resolveremos a través de tribunales, eso no nos intimidará, si es lo que se busca. Seguiremos adelante, estamos aún más legitimados desde un punto de vista democrático", ha dicho Mas, que ha explicado que ha enviado una carta a Rajoy tras el 9-N en estos términos. En la misiva, Mas además le dice al presidente del Gobierno que la situación actual requiere "más política y menos tribunales", pero ha avisado de que no paralizará su hoja de ruta soberanista, orientada a lograr una "consulta definitiva" si no hay respuesta desde la Moncloa.

"Si tiramos para adelante es porque no hay voluntad política en el otro lado (Estado); si no, lo haríamos de forma acordada", ha añadido Mas, quien ha dicho no obstante que "esto no quita que si alguien al final se da cuenta en España de que es mejor hacerlo de forma acordada, a la británica o canadiense, nos apuntamos". Sin fijar plazos para la respuesta desde la Moncloa, Mas ha apuntado que no descarta las elecciones de tipo plebiscitario, aunque es algo que se debe ver como un "instrumento" para consultar a los catalanes y no como un "objetivo" del proceso soberanista.

Enfriado el clima de un adelante electoral, Mas ha evitado poner fecha a estos eventuales comicios y ha explicado que se da un margen de unos 15 días para completar su reflexión sobre los pasos a seguir. En este tiempo iniciará una ronda de contactos, sin "condiciones previas", con los líderes de las formaciones proconsulta (CiU, ERC, ICV-EUiA y CUP), incluido el PSC, para analizar cuál es el mejor instrumento para consultar a los catalanes y si son posibles estas elecciones de tipo plebiscitario que hagan la función de referendo independentista.

En su comparecencia, Mas ha reiterado que llevará los Presupuestos de la Generalitat de 2015 al Parlamento, aunque no tenga garantizados por el momento los apoyos parlamentarios. En una alusión implícita a ERC, que se desmarcó de la negociación de las cuentas cuando el Govern descartó la primera consulta, el presidente catalán ha afirmado: "Alguno nos tendrá que explicar por qué estamos en minoría si el 9-N ha sido un éxito".

En cuanto a la Fiscalía, Mas ha aseverado que el Govern no ha recibido aún ninguna comunicación, pero ha declarado: "Estamos muy tranquilos, no hemos hecho nada ilegal". "No tenemos miedo ni temor", ha incidido Mas, que ha precisado que no se trata de "ir presumiendo por presumir" sino de cumplir con un "mandato muy claro" de una mayoría de catalanes que quiere ejercer el derecho a decidir y, con este objetivo, ha aseverado, está dispuesto a "arriesgar".

Asimismo, Mas ha denunciado que los sistemas informáticos de la Generalitat sufrieron un "ataque organizado durísimo" durante el 8 y 9 de noviembre, coincidiendo con el proceso participativo, un ataque que, "por su envergadura", ha dicho, "no puede ser de hackers amateurs", aunque ha explicado que aún están investigando para poder averiguar quién es el responsable.