La Guardia Civil precinta un pozo de dos metros de diámetro a ras del suelo en Estepona

El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ha procedido al precinto de un peligroso pozo que se encontraba en el paraje El Velerín del término municipal de Estepona. La actuación tuvo lugar tras recibir el aviso de un ciudadano en el que informaba de la existencia de un pozo de grandes dimensiones con peligro para las personas y animales, ha indicado la Guardia Civil en un comunicado.

Una vez personados en el lugar los agentes observaron un pozo de antigua construcción de grandes dimensiones, unos dos metros de diámetro, que se encontraba a ras del suelo y sin tapadera ni ningún tipo de medida de seguridad, constituyendo un grave riesgo por caídas accidentales.

El pozo mantenía agua en su interior, a unos cuatro o cinco metros, desconociéndose la profundidad total del mismo. Igualmente, parecía encontrarse en desuso o en estado de abandono, ya que no posee ningún sistema de extracción de aguas ni contador homologado, procediéndose al precintado del mismo y a la señalización de la zona de peligro para evitar que se produzca cualquier incidente.

Así, tras continuar con las gestiones fue identificado el propietario de la finca, procediéndose a realizar las correspondientes denuncias por las infracciones administrativas cometidas.

Más de 1.700 inspecciones en España

En el marco de la operación Mizu, la Guardia Civil realizó el pasado año en toda España 1.724 inspecciones en diversas explotaciones y detectó 1.342 infraestructuras ilegales para captar agua, la mayoría pozos, mientras que han sido detenidas e investigadas 92 personas por la comisión de 106 delitos.

Así, en 2023 los agentes constaron un total de 106 delitos contra los recursos naturales y el medioambiente, contra la ordenación del territorio, defraudación de aguas y fluido eléctrico. Además, se denunciaron 2.341 infracciones administrativas, principalmente por incumplimientos a la normativa de aguas (67%), e interpusieron 347 denuncias a la normativa sobre urbanismo y ordenación del territorio, y 312 a la normativa sobre minas.

En la ejecución de los referidos controles e inspecciones se detectaron 1.342 infraestructuras ilegales asociadas a la captación ilegal de aguas. Más del 80% de estas infraestructuras se corresponden con pozos y sondeos, encontrándose también otras infraestructuras de captación ilegal de aguas de diversa naturaleza, como balsas, canalizaciones de riego y cauces de ríos o arroyos.