La Policía investiga si el hombre hallado muerto en una finca de Estepona estaba robando e iba acompañado

La Policía Nacional investiga la supuesta implicación del ciudadano de 38 años y origen rumano encontrado sin vida en una finca de Estepona en uno de los robos ocurridos en la zona. Una de las principales hipótesis que manejan los investigadores es que el fallecido, que fue hallado con un corte en el cuello y numerosos golpes -sobre todo- en la cabeza, estaría en compañía de, al menos, otra persona asaltando propiedades en esta zona de campo de la localidad malagueña la noche que se produjeron los hechos. No obstante, los agentes continúan con las averiguaciones para resolver las incógnitas que rodean el crimen tras el hallazgo y será la investigación la que confirme este extremo. De momento no se descarta ninguna hipótesis, entre otras, que el presunto autor acabara con la vida de la víctima por desavenencias tras cometer el delito.

Las primeras pesquisas apuntan a que el asesinato se habría desencadenado en este contexto y, para ello, se habría empleado como arma un objeto contundente que estuviese en el lugar. De esta manera, los investigadores rechazan, a priori, que se trate de un crimen premeditado, y se centran ahora en identificar y localizar al acompañante del finado, según fuentes próximas la caso consultadas por Málaga Hoy.

Asimismo, los primeros resultados de la autopsia que se le ha practicado al cuerpo han revelado que fueron múltiples los traumatismos que presentaba el hombre, sobre todo, en la cabeza, pero también en otras zonas del cuerpo los que provocaron su muerte, lo que hace indicar que "se habrían ensañado propinándole golpes" con un objeto contundente que, por el momento, no ha sido localizado, siempre de acuerdo con las fuentes. También le provocó daños el corte que sufrió en el cuello, a causa, probablemente, de una arista del arma homicida. Se trataba, en palabras del subdelegado del Gobierno, Javier Salas, de una "herida abierta inciso contusa".

La noche en la que fue asesinada la víctima, al que le constan antecedentes penales, se registraron algunos robos en la zona, tal y como han podido constatar los agentes. Los días previos también. De hecho, los investigadores se encuentran analizando las imágenes de unas cámaras de seguridad que, al parecer, captaron el robo que sufrió una de las fincas situada también en el mismo lugar.

Los aguacates, el botín más codiciado

Algunos vecinos de la zona, con los que ha podido contactar este periódico, explican que los asaltos a sus viviendas son recurrentes desde hace unos años. Los aguacates son el botín más codiciado. Así lo reconoce uno de ellos, que lamenta que hace ya unos meses se llevaron más 30 kilos de este fruto. Tras lo acaecido hace dos madrugadas, confiesa sentirse "más intranquilo que nunca".

Los hechos ocurrieron el pasado domingo 13 de octubre, sobre las 13:00. Los agentes acudieron a una vivienda ubicada en una zona rústica del municipio tras la llamada de sus propietarios, que alertaban de la presencia de un cadáver en el lugar. Allí, los policías constataron que un hombre con aparentes signos de violencia yacía sin vida. Hasta la finca desde la que se había recibido el aviso también acudió la comitiva judicial, que forman el juez de guardia, el letrado de la Administración de Justicia (LAJ) y el médico forense- para proceder al levantamiento del cadáver, que fue trasladado este lunes al Instituto de Medicina Legal (IML) de Málaga para la práctica de la autopsia, que se ha prolongado hasta este martes con el fin de determinar con exactitud la causa de la muerte y arrojar más luz al caso.

No obstante, la investigación continúa abierta para aclarar qué ha ocurrido exactamente y quién es el responsable. Por el momento, no se han praticado detenciones.