Flores, lunares y sombreros: así es la moda en la Feria de Málaga

Lunares, mujeres caminando moviendo los volantes de sus vestidos, cabellos recogidos con claveles, rosas y todo tipo de flores y hombres con sombrero y algunos vestidos con el traje tradicional. Así se ven las calles del Centro y el Real en pleno día de Feria. Málaga se llena de vida y color, donde el folclore y la moda se entrelazan en cada esquina. 

En la Plaza de la Constitución, Noemí García, una madrileña con raíces malagueñas, y su amiga Elena Jacinto, malagueña de nacimiento, disfrutan del ambiente festivo. “Yo nací en Madrid, pero mi familia es de aquí, vengo de vacaciones a ver a mi familia”, comenta Noemí. Ambas lucen trajes de flamenca con orgullo, pero cada una con un toque personal. “Este me lo ha hecho mi abuela, que es modista de flamenco”, dice Noemí señalando su falda, mientras Elena confiesa que ha optado por la comodidad: “Voy con un pantaloncito debajo y estoy súper cómoda”. Sus risas resuenan mientras hablan de la practicidad de sus atuendos, destacando la importancia de llevar un look que no solo sea bonito, sino también funcional para el calor malagueño.

"Quería enseñarle a mi familia la tradición "

A unos metros, también en la plaza de la Constitución, se encuentra Esther, malagueña de corazón. Este año ha decidido vestirse de flamenca, motivada por la visita de su cuñada valenciana. “Mi cuñada y su familia han venido y querían vestirse, así que las acompaño”, explica. Aunque solo ha salido un día, asegura que la experiencia de vestir el traje tradicional ha sido gratificante, a pesar del calor. “Con los abanicos y buscando sombras, se sobrelleva bien”, afirma mientras se prepara para una jornada que culminará en el Real.

"Vengo de traje típico para acompañar a mi prima y disfrutar"

A un lado de calle Larios, José Rodríguez, venido de Lucena, Córdoba, destaca con su traje de cordobés. “Vengo acompañando a mi prima, que se ha vestido de flamenca y yo decidí animarme también”, comenta con una sonrisa. Su traje, compuesto por una camisa blanca, pantalones ajustados con una cinta roja y un sombrero, refleja la esencia del folclore masculino andaluz. “Acompañamos a las flamencas, es parte de la tradición”, explica, mientras disfruta del ambiente tardío del Centro malagueño.

"El calor no impide que vista de lunares esta Feria"

A pocos metros de allí, María pasea mientras observa un grupo de verdiales. Aunque no viste de flamenca, su atuendo con lunares y pendientes grandes no pierde el aire festivo. “Hace mucho calor, por eso he venido más informal, pero sin perder el toque flamenco”, dice mientras se junta con su familia. Como muchos otros, María opta por un estilo más ligero, reservando el traje de flamenca para una Feria en la que las temperaturas no sean tan elevadas.

"Quería vestir cómoda pero manteniendo la tradición"

Al igual en calle Larios, Katia se prepara para encontrarse con sus amigos. “Aunque tengo traje de flamenca, hoy he preferido algo más cómodo por el calor”, comenta, vistiendo una falda pantalón de lunares y un top blanco, complementado con una flor y un mantón amarillo. Para Katia, la comodidad es clave, pero sin dejar de lado los detalles que marcan la esencia de esta festividad.

La feria de las pinzas de flores

Una novedad ha llegado a los puestos de la Feria: además de los tradicionales abanicos, mantones y flores. Este año se han incorporado pinzas de plástico con flores de apariencia tropical. Sirven tanto para recogerse el pelo como para adornarlo y se han convertido en un accesorio imprescindible entre las chicas jóvenes. Esta tendencia, que ha surgido en redes sociales, ha encontrado su momento de esplendor en la Feria, añadiendo un toque moderno al estilo tradicional. Las calles del Centro y del Real se convierten en un desfile de color y tradición durante la Feria de Málaga. Cada prenda, desde los lunares hasta las flores pasando por los sombreros, contribuye a un espectáculo que transmite la esencia de una ciudad que celebra su feria con orgullo.