El Kanka, pregonero de la Feria de Málaga 2024: "Gracias por darme el honor de ser profeta en mi tierra"

La Feria del Real no empieza hasta que el pregón da el pistoletazo de salida de la gran semana de la ciudad. Este año, el encargado ha sido El Kanka (Juan Gómez), el cantautor malagueño, "Juan es un gran malagueño de corazón, es hacedor de canciones, canta, compone y el estilo es suyo, es un orgullo que un artista de Málaga tenga esta proyección internacional" en palabras del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre. Dentro de un año repleto de proyectos, el artista se ha dirigido a los malagueños para dar comienzo a la Feria de Málaga.

Frente a la portada del Real Cortijo de Torres, el cantautor ha interpretado un pequeño tema compuesto para la ocasión, en el que menciona comida y lugares conocidos de la ciudad. Después ha dedicado unas palabras a Málaga y los malagueños: "En estas calles fui un crío con Málaga en el ayer y hoy me toca agradecer a este pueblo, que es el mío". Con un juego de palabras, ha indicado que "no hay orgullo mayor que ser vuestro pregonero" y que "para amar esta ciudad me sobran mil y un motivos". También ha dicho que va de la "feria de noche a la re-feria de día" cantando sus poesías "de caseta y carricoche".

El artista ha nombrado varios lugares icónicos de la ciudad, como "la Mónica", El Tintero y El Cenachero. Y, como no podía ser de otra manera, también se ha acordado del Cautivo. Y del campero, la comida estrella. Pero no solo ha hablado de sitios reconocibles o de imágenes tan icónicas para Máñaga, sino que también ha hecho un juego de palabras con algunos términos muy de la tierra, como "piarda", que es la "forma malagueña, suavona y medio risueña, de liarla siempre parda", "pechá", "perita", "merdellones" o "estar aliquindoi".

"Con mi música y mi canto, nunca podré daros tanto como me estáis dando hoy", ha pronunciado. Tampoco podía olvidarse de los "eternos protagonistas" de esta "ciudad de locos y artistas" como Picasso y Chiquito de la Calzada, Pepa Flores y el Mocito. "En Málaga no hay fronteras, todo aquel que quiera, pasa, y siempre hay ganas de guasa", ha pronunciado, pero también un guiño a la turistificación con la estrofa que dice: "Aquí acogemos a todos, lo cual no quiere decir que ahora tengamos que huir de cualquier manera y modo".

Por último, el cantautor ha deseado que Málaga sea "una ciudad brillante, compasiva y tolerante, cuna de la libertad", que "cuide de sus rincones desde la montaña al puerto y a ver si hacemos, por cierto, algo con los Asperones". Ha recordado a los malagueños que tengan "cuidado con el Cartojal que es fresquito, pero engaña" y se ha despedido con un "gracias por darme el honor de ser profeta en mi tierra" y un guiño a Chiquito de la Calzada: "Esto no es un adiós, es un hasta luego, Lucas".

El Kanka ha estado acompañado por Francisco de la Torre, la concejala delegada de Servicios Operativos, Playas y Fiestas, Teresa Porras y un traductor de lengua de signos que ha retransmitido las palabras del artista, momento cumbre que ha llegado tras la intervención de la Banda de Música Municipal de Málaga, que había amenizado la primera noche en el Real con un concierto de media hora. Después del discurso de El Kanka, han interpretado el himno de Andalucía y el himno de España.

El público no ha querido irse y ha gritado al unísono que El Kanka cantase algo. Y así ha sido. El cantautor malagueño ha cumplido los deseos de sus paisanos. Ha cogido su guitarra y ha interpretado su canción Andalucía, en la que viaja por todas las provincias de la comunidad. Los asistentes le han acompañado con alegría, palmas y buen rollo.

Al acabar el pregón, y después de una gran ovación por parte de los asistentes, el regidor ha dado paso a otro de los momentos más esperados y destacables de la noche: el encendido del alumbrado. El Kanka ha sido quien ha pulsado el botón del alumbrado del Cortijo de Torres, inaugurado en 1998. Vestido de gala y con todas las luces ya encendidas, el Real está de Feria, una de las semanas más grandes y esperadas por los malagueños. Unos días que se viven con emoción, alegría y buena compañía.

Dos millones de luces led iluminan la Feria en el Real Cortijo de Torres. Parecen pocas cuando algo es tan grande. La puerta principal es ya un elemento característico de la Feria de Málaga y miles de personas posan ante ella para inmortalizar momentos únicos. Un alumbrado que representa la luz de la ciudad, una portada grande, a la altura de la grandeza de la Feria de Málaga.