Blanca Suárez, sobre Locomía: "Ser un referente con sus abanicos y que lo sigan siendo es icónico"
'Disco, Ibiza, Locomía'
La actriz encarna a Lurdes, miembro del grupo Locomía, en el nuevo largometraje de Kike Maíllo que se ha estrenado este viernes en el Festival de Málaga
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Disco, Ibiza Locomía. ¿Quién no recuerda esa canción que sin quererlo al escucharla una vez se queda en la memoria de muchos para siempre? A finales de los 80, en miles de hogares de todo el mundo era lo único que sonaba. Locomía marcó un antes y un después en el mundo de la música y en una generación que no fue la misma cuando se separaron. Ahora, más de tres décadas después, llega al Festival de Málaga el largometraje Disco Ibiza Locomía que cuenta como a mediado de los 80 Ibiza está en ebullición y Xavi Font, junto con Lurdes Iribar y Manolo Arjona crean el grupo de música Locomía que llegará al éxito, pero conocerá el lado más oscuro de la industria.
Blanca Suárez da vida a Lurdes, una joven cuya vida es la moda y llega a Ibiza para buscarse la vida y cumplir sus sueños. Allí, de la mano de sus dos mejores amigos, crean su propia familia y su pequeño lugar en el mundo. La actriz no dudó ni un segundo en decir que sí cuando le llegó la propuesta de hacer esta “gamberrada”. Cogió los abanicos, las hombreras y los zapatos de punta para, después de meses de trabajo, convertirse en una Locomía más. Para ella al grupo "lo mueve la amistad, el compartir gustos y el refugiarse los unos con los otros".
–¿Qué le impulsó a dar el paso para adentrarte en esta aventura?
–Me pareció una gamberrada y que era seguir un poco con la estela de rascar e investigar en la historia del grupo. También para las personas que, a partir de mi generación, se nos empieza a quedar un poco lejos. Hace unos años a partir de un documental nos dimos cuenta de que ahí había mucho que contar, pero de repente participar en una ficción como parte principal implicada del grupo me parecía una fantasía y muy atrevido con todo lo que conllevaba: esos looks, la música, las actuaciones y la intrahistoria.
–¿Cómo ha sido darle vida a Lurdes en la ficción?
–Fue muy divertido. Ellos al final crearon una burbuja en la que salían de los estereotipos que en esos momentos y hasta casi nuestros días, se han arrastrado sobre las mujeres. Lurdes tuvo la oportunidad desarrollar su creatividad, de tener una presencia muy importante en su vida, pero justo cuando el grupo empezó a tomar una relevancia bastante importante ahí actuaban como la sociedad debido un poco al momento histórico que se estaba viviendo y se aparta. Después a la hora de preparar el personaje, había muchas cosas que a la hora de leer la secuencia, al investigar y al hablar con la Lurdes real sí te sientes un poco identificado, pero a la hora de abordar un personaje la utopía es tu como persona, yo como Blanca, intentar estar lo más alejada posible del personaje que en ese momento tengo entre manos.
–En el largometraje la hemos visto bailando y dominando el movimiento de los abanicos, ¿cómo fue la experiencia?
–Ha sido un trabajo de sudor y lágrimas, pero de mucha alegría y satisfacción. En la película no se puede mostrar todo el tiempo y todo lo que dedicamos al mundo de la actuación y demás, pero sí que estuvimos casi tres meses de ensayos. Tuvimos un cuerpo de baile detrás con mucha paciencia a nuestro lado. Todo ha sido mucho sudar. Parece fácil el mundo abanico, pero no lo es. La experiencia ha sido muy exigente y curiosa, pero lo repetiría mil veces. Me ha dado mucha satisfacción cuando salían las coreografías. Al equipo técnico le explotaba la cabeza cuando llegábamos allí y veían lo que habíamos preparado. Era como una función de colegio, una forma de decir esto es lo que me he preparado durante tres meses.
–Aparte de los abanicos y el baile, la moda es una seña de identidad del grupo.
–Locomía no sería Locomía sin el vestuario y las creaciones que ellos hacían. Lurdes era absolutamente responsable junto con Xavi de todos los looks que salen en todas sus actuaciones. Ellos, sobre todo Lurdes, viven para la moda, es su gran pasión. Ideaban y confeccionaban sus vestuarios que además han marcado una época. Me parece que volverse un referente con las hombreras, los abanicos y esos zapatos en punta y que a día de hoy siga siendo un referente que esté más o menos en nuestra retina me parece icónico.
–La amistad y la familia son la base de este grupo.
–Es el origen de todo y lo que empieza a moverlo todo. Su mundo lo mueve la amistad, el compartir gustos, vivencias, refugiarse los unos en los otros. Al final, evidentemente, si tenías unas series de gustos o si querías vivir una vida determinada no en todos los hogares estaban de acuerdo con esto y entre ellos formaron su propia familia en la que tenían sus reglas, sus formas de vivir
–En el momento en que el grupo tuvo éxito, comenzaron los problemas, ¿por qué cree que fue así?
–Porque el éxito es difícil. Debería estar seguido de alguien que te cuente como gestionarlo y de un entorno que te ayude a hacerlo. Estamos hablando de un grupo que lo reventó a un nivel muy importante, llenó estadios en Latinoamérica y que estaban a punto de dar el salto a EEUU. Lo reventaron muchísimo y eso conlleva muchísimas cosas. Si todos esos mimbres a priori tienen que estar sólidos y no lo están, pues el barco se hunde.
–¿Por qué el público debería ver Disco, Ibiza Locomía?
–Va a ser un viajazo de muchas clases. Se van a reír, van a bailar, van a quedarse con la boca abierta, van a empatizar y puede que incluso en algún momento se les escape una lagrimilla. Van a disfrutar muchísimo.
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