Una nueva belleza
Con su nueva campaña publicitaria, Sephora cuestiona los estándares de belleza.
Antes otras marcas como Mattel, Calvin Klein o Nike ya lo han hecho.
La columna vertebral de las campañas publicitarias es, sin duda, la necesidad de los consumidores. Es un hecho que las generaciones cambian y por tanto también sus exigencias. Actualmente la búsqueda por desclasificar los estereotipos y los estándares es una demanda más de los consumidores. La percepción sobre una marca puede cambiar a partir de su publicidad; por ejemplo, hace años la imagen de Barbie fue criticada porque imponía un estricto estándar de belleza.
Mattel, la fabricante, diversificó su oferta y en la actualidad las muñecas con particularidades son más vendidas que las de siempre, como la que va en silla de ruedas. De ahí que la firma de cosmética Sephora haya dado un paso adelante visibilizando distintas formas de entender la belleza, una belleza más natural, inclusiva y diversa. La firma, junto a la agencia BETC, han elaborado la campaña The Unlimited Power of Beauty (El poder ilimitado de la belleza), que pone el foco en la belleza sin artificios, marcando distancia con sus iniciativas de años anteriores.
Parte principal de este concepto creativo es un anuncio dirigido por Jonas Lindstroem que cuenta la historia de la relación de una mujer con ella misma a lo largo de su vida, destacando momentos de duda y fortaleza a través de su evolución personal y crecimiento en cada etapa existencial. Todo acompañado de un fondo musical con la canción de Kelsey Lu No estoy enamorado.
La campaña, calificada como 360 grados por constituir un auténtico giro de tuerca, también cuenta con fotos de Nadine Ijewere junto a sus diferentes productos de perfumería, maquillaje y cuidado de la piel. Cada una de las doce imágenes muestra la riqueza de la belleza sin importar edad, sexo, físico o estilo. Muestran a personas con diferentes tonos de piel y formas de rostros. El mensaje es que cada retrato tiene su punto de vista, y todos ellos son bonitos.
Sobre esta campaña Rémi Babinet, fundador, presidente y director Creativo del Grupo BETC, ha comentado que "ofrece una visión fuerte, ambiciosa y completa de la belleza". Y añade: "crea espacio para la autoexpresión, mostrando la variedad de bellezas auténticas y poderosas que componen el mundo de hoy". Para Florence Bellisson, directora creativa de BETC Etoile Rouge, "la belleza está evolucionando y ya no tiene requisitos reales. Queríamos producir algo verdadero, de ahí la elección de los diversos actores y creativos. Esta campaña es muy completa y muy Sephora porque combina autenticidad, emoción y alegría".
El proyecto determina que la belleza es el lugar donde todo el mundo tiene poder y derecho sobre él. La campaña se lanzará en cine, televisión, prensa, vallas publicitarias y medios digitales en Europa y Oriente Próximo. Y desde el pasado 18 de febrero ya está disponible en las tiendas de Sephora en Francia. La contribución española viene de la mano de un vídeo creado por la agencia Flash2flash. Se trata de una beauty film grabada a partir de un manifiesto proporcionado por Sephora que redefine el concepto de belleza. Lo protagonizan los actores Eduardo Casanova y Rossy de Palma con la participación musical de Sandra Delaporte. En ella, los personajes definen cómo entienden la belleza para luego apoderarse de esta definición como forma de mostrarse tal y como son en la realidad.
Este intento de Sephora por cuestionar la belleza femenina no es el único. Calvin Klein, por ejemplo, lanzó en 2019 una campaña que planteaba la pregunta "¿qué es ser sexy?" Además, la marca ha contratado a modelos transexuales como Chella Man y la japonesa Ellyanna Banes Sánchez posó para uno de sus anuncios con las axilas sin depilar. Nike es otra firma que intentó renombrar los estándares de belleza también con mujeres luciendo vello en la axila, y para Adidas es un tema recurrente en sus campañas publicitarias.
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