¿Quién es en realidad la princesa de Gales, Kate Middleton?

Carole Middleton (Goldsmith de soltera, como ha recordado su hermano que pasó fugazmente por el Gran Hermano VIPGran Hermano VIP de Reino Unido hace unas semanas) puso todo el empeño para que su hija Kate conociera al príncipe Guillermo, hijo de Lady Di, nacido como segundo en la línea de sucesión al trono. The Crown incide en cómo fue su madre quien tozudamente quiso ver a su hija como princesa de Gales. Carole convirtió a Kate en la princesa Catalina.

Los Middleton crearon una pequeña fortuna con Party Pieces, una empresa de artículos de fiesta que fundaron en 1987 (su hija mayor tenía cinco años). Carole era hasta entonces azafata y Michael Middleton, controlador aéreo. Además de expandirse con la empresa supieron invertir en propiedades inmobiliarias. La madre de la familia quería asegurar a sus hijos un futuro blindado, como así fue. Pero para Kate tenía metas mayores, haciéndole soñar con ser princesa, con ser una futura reina.

Y con su tenacidad acertó: la hija de los Middleton siempre ha sido la persona más valorada de la familia real británica. Siempre ha tenido en mete a su fallecida suegra y el príncipe, su marido, siempre ha velado para que su esposa no viviera el calvario de persecuciones que sufrió su madre. En parte lo evitó, pero no ha podido eludir esta reciente crisis mediática a raíz de la 'desaparición' de Kate tras la operación del mes de enero. La princesa ha debido comparecer en un vídeo para confesar que padece cáncer. Pide tranquilidad y afecto para superar este grave momento. Los medios lo van a respetar y se ha ganado con crecer el aprecio de su suegro, el rey, que la ha destacado como una valiente tras el sereno y sincero discurso lanzado este viernes. Ambos están tratándose de un cáncer.

El pasado de la princesa de Gales

Kate ha cumplido siempre desde que se convirtió en prometida de Guillermo de Inglaterra. Es madre de tres niños, que hay que proteger ahora más que nunca, y que garantizan la continuidad estable de la Corona: Jorge, ahora segundo en la sucesión, que tiene 10 años; Carlota, con 8; y el pequeño Luis, de 5. Los tres aparecían sonrientes en la foto del Día de la Madre rechazada por retoques y que vino a acrecentar las dudas sobre su estado de salud.

La princesa de Gales (Reading, 1982) conoció a su marido con 19 años. Según The Crown la madre la 'arrimó' para que coincidiera con Guillermo en la escocesa universidad de Saint Andrews en el curso de 2001. Ella, graduada en Historia del Arte, tiene un año más que él y han pasado ya media vida juntos. Tiene un hermano, James, que se ha mantenido en segundo plano, en una vida bucólica que va a tratar en un libro, y una hermana, Pippa, estrella mediática, casada con un millonario.

De ser unos amigos de universidad que compartían piso terminaron siendo pareja, iniciando su relación en 2003 y la primera foto captada por la prensa fue en la primavera siguiente. La prensa estaba más calmada en atosigar a la futura princesa tras el delirio que fue la vida de la anterior heredera consorte. Y mientras Guillermo mantuvo una vida sentimental estable al lado de su amor universitario, el hermano de éste, Enrique, tuvo un corazón más disperso hasta casarse con la actriz Meghan Markle. Guillermo y Enrique han tenido de adultos una complicada relación entre hermanos. La relación de Kate y Meghan terminó siendo similar y los duques de Sussex abandonaban el Reino Unido y de esta manera sus compromisos oficiales con la Corona en el año 2020. El libro En la sombra con el testimonio de Harry y publicado el pasado año vino a avivar el malestar. Un rencor de hermano y cuñada que no se va a diluir por ahora.

En 2007 Guillermo y Kate vivieron una crisis como pareja que superaron a los pocos meses, reconciliándose y convirtiéndose en prometida en noviembre de 2010, con el anuncio oficial de la boda que se celebraría en Westminster el 29 de abril de 2011 ante representantes de las casas reales de todo el mundo. Convertidos en duques de Cambrige, dos años después nacía Jorge. Tras la muerte de Isabel II en septiembre de 2022 y el anuncio de un cáncer de Carlos III en enero, los acontecimientos parecen precipitarse en Windsor, de ahí que el cáncer que padece la princesa Catalina haya provocado un seísmo mayor.

La monarquía más antigua y longeva de occidente asiste uno de esos hitos críticos que jalonan su devenir.