Planes de octubre en el corazón de la Costa del Sol

El primer tramo del otoño avanza hasta tener los amaneceres más tardíos del año y las horas de luz solar diarias son cada vez menos. Aún así, es una época del año en el que las temperaturas y el tiempo atmosférico suelen ser buenos para programar buenas jornadas de asueto. Aunque las jornadas de playa con sol y baño pierden interés en este punto del año, el corazón de la Costa del Sol cuenta con lugares en los que se pueden pasar buenos días. Benalmádena es una de las localidades con un gran número de plazas hoteleras y visitantes anuales que se suelen concentrar, aunque no sólo, en los meses estivales. La evolución de su expansión durante los últimos 75 años es bastante espectacular y la ha convertido en una urbe importante de la costa en el siglo XXI. Aunque en los últimos años no está abierto uno de sus lugares de atracción como era el Tivoli WorldTivoli World, tiene argumentos para una buena jornada.

Es una localidad bastante grande, con tres núcleos (Benalmádena Costa, Arroyo de la Miel y Benalmádena pueblo) que están conectados pero que tienen características distintas. En su litoral, Puerto Marina es uno de esos lugares con puntos peculiares en los que disfrutar de un atardecer distinto, siguiendo su paseo marítimo se puede encontrar El Bil-Bil, un falso castillo que cautiva esta parte de la costa benalmadense y tiene casi un siglo de peculiar historia. Siguiendo en sentido occidental se pueden disfrutar de calas y puntos del litoral en el que el paisaje cambia bastante y es bastante agradecido para un buen paseo. En las inmediaciones de El BilBil se encuentra el popular parque de La PalomaLa Paloma, un lugar por el que pasear entre especies vegetales y animales en un entorno fresco que cuenta con un lago y otras instalaciones para relajarse al aire libre. En sus inmediaciones se encuentra el exótico Selwo MarinaSelwo Marina, un parque animal en el que se pueden ver animales y plantas de todos los continentes, pingüinos incluidos

Benalmádena pueblo

El núcleo de Benalmádena pueblo no sólo ofrece la estampa de un clásico pueblo andaluz de casas blancas y pequeñas calles, también tiene el Museo de Arte Precolombino Felipe Orlando un sitio en el que poder conocer el pasado de la localidad y también visitar particulares obras de arte precolombino entre las que se incluyen importantes deidades, es un sitio especial que no está muy lejos de los jardines del Muro, un espacio agradable en el que disfrutar del entorno y del paisaje. Siguiendo con las proximidades, esos jardines están a un paseo de la espectacular estupa budista de La Iluminación, en cuyas paredes se cuenta la historia del buda ShakyamuniShakyamuni a través de unas pinturas inspiradas en los monasterios del HimalayaHimalaya. Además está en un punto de la localidad con unos miradores espectaculares sobre la costa mediterránea. A pocos metros de la estupa se encuentra el mariposario de la localidad, todo un edificio peculiar en el que ver animales que a menudo pasan desapercibidos y que tiene un microclima especial. También se encuentra a un leve paseo la peculiar e impactante galería de arte urbano bajo la autovía A-7 inspirada en personajes cinematográficos entre los que se encuentra el añorado Quique San Francisco.

Además, el impresionante castillo de ColomaresColomares está a menos de un kilómetro de distancia. Es uno de los monumentos más visitados de la zona y tiene una historia bastante peculiar. Se trata de una obra pensada al centímetro que sorprende desde la lejanía y cautiva cuando se tratan de descifrar los guiños históricos que sus constructores pensaron en cada detalle del monumento. En las inmediaciones de la propia estupa y no lejos de esta zona también está el teleférico de la localidad que salva un desnivel de más de 700 metros en 15 minutos y ofrece sensaciones y vistas espectaculares.