Las fiestas gastronómicas de la Chacina, el Pan Duro y la Zanahoria Morá en estos tres pueblos de Málaga este fin de semana

Benaoján, Valle de Abdalajís y Cuevas Bajas celebran fiestas y ferias gastronómicas este fin de semana en el que se despide noviembre y se abraza diciembre

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Los carteles promocionales de las tres fiestas gastronómicas de Benaoján, Cuevas Bajas y Valla de Abdalajís.
Los carteles promocionales de las tres fiestas gastronómicas de Benaoján, Cuevas Bajas y Valla de Abdalajís.

25 de noviembre 2024 - 06:10

La provincia de Málaga, rica en tradición y sabores, ofrece un fin de semana perfecto para los amantes de la gastronomía. Tres localidades celebran festividades únicas que combinan cultura, historia y productos locales, transformando estos eventos en una invitación a descubrir la esencia más auténtica de la provincia. Benaoján, Valle de Abdalajís y Cuevas Bajas se convierten en los destinos imprescindibles del 30 de noviembre al 1 de diciembre de 2024 con sus fiestas en torno a la chacina, el pan duro y la zanahoria morá.

Feria de la Chacina en Benaoján: 30 de noviembre y 1 diciembre

Ubicada en la Serranía de Ronda, Benaoján es conocida por su tradición centenaria en la transformación de productos cárnicos. Este legado artesanal se exhibe cada año en la Feria de la Chacina, donde se celebra la calidad y autenticidad de sus embutidos. Durante el evento, una veintena de stands presentan una amplia variedad de productos artesanales, desde lomo frito y chorizos secados al sol hasta dulces, panes, mieles y conservas. 

Su feria tendrá lugar en la Caseta Municipal de Benaoján y en ella podrás encontrar stands de diferentes empresas y comercios donde degustar y comprar productos típicos de la gastronomía benaojana. Además, está fijado un concurso de cortadores de jamón y conciertos gratuitos de La Flaka (sábado, 19:00 horas) y Eduardo El Campanero (domingo, 18 horas).

Fiesta del Pan Duro en Valle de Abdalajís: 30 de noviembre y 1 diciembre

En el Valle de Abdalajís, el pan duro deja de ser un simple ingrediente de cocina para convertirse en el protagonista de una celebración que une tradición, sostenibilidad y creatividad. Durante esta festividad, bares y restaurantes locales reinterpretan la cocina de subsistencia, elaborando platos como migas, albóndigas, porra y sopas, todos preparados con ingredientes de temporada y el característico pan del Valle. La fiesta no solo destaca por su oferta gastronómica, sino también por su enfoque en la sostenibilidad y el aprovechamiento de alimentos. Además, busca revitalizar la actividad panadera del municipio, apoyando a las nuevas generaciones de panaderos que mantienen viva esta tradición. 

El programa incluye un Mercado de Productos Locales y Artesanía, donde podrás encontrar, además de pan, otros productos como miel, quesos artesanos, aceite de oliva virgen extra, embutidos y muchos más productos con Sabor a Málaga. Estará ubicado en las inmediaciones de calle Real, de 11:00 a 17:00 horas tanto el sábado como el domingo. Habrá también talleres para niños, concursos, visitas guiadas y actuaciones musicales.

Fiesta de la Zanahoria Morá en Cuevas Bajas: 1 diciembre

La singular zanahoria morá de Cuevas Bajas, con su intenso color violáceo y reconocidas propiedades saludables, es la protagonista de esta celebración anual en la Vega de Antequera. Este tubérculo, que se cultiva en las fértiles riberas del río Genil, tiene una historia que se remonta a más de 13 siglos, vinculada a las caravanas árabes que trajeron sus semillas desde Oriente. 

La Fiesta de la Zanahoria Morá combina tradición y turismo rural en su edición número 20. Los visitantes pueden adquirir este exclusivo producto y degustarlo gratuitamente en platos como migas, además de disfrutar de la cocina típica de la comarca. Un mercado agroalimentario, talleres, actuaciones y actividades completan el programa festivo, ofreciendo una experiencia para toda la familia en torno a su cultivo estrella y los numerosos productos locales que albegan.

Cuevas Bajas aprovecha esta fiesta para mostrar sus encantos, desde su patrimonio cultural e histórico hasta los paisajes de la ribera del Genil. Es una oportunidad única para descubrir un destino que ha apostado por el turismo rural sin perder su autenticidad. 

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