Invierno y Málaga es un binomio que cobra sentido con lugares como estos

Desde el pasado 23 de diciembre, el invierno se instaló oficialmente, aunque llevemos semanas en los que el espíruto navideño ande rondando por Málaga y las temperaturas inviten al abrigo. Y es que con el frío llegan las ganas de manta y película, pero en Málaga el invierno invita también descubrir otra cara de la provincia, una que florece con planes indispensable para disfrutar de su naturaleza y patrimonio, que en esta temporada despliega su encanto más reservado. Y es que nuestra provincia saca en invierno un catálogo de experiencias que combinan naturaleza, cultura y gastronomía. Desde las sierras hasta los pueblos blancos, pasando por ciudades con un legado inigualable, este es el momento perfecto para descubrir el lado más íntimo de Málaga.

Villanueva del Rosario: montañas que evocan los Pirineos

En el entorno de Villanueva del Rosario se alza la imponente Sierra de Camarolos, apodada los Pirineos del Sur por sus majestuosas paredes calizas, ideales para los amantes de la escalada. Este enclave natural ofrece rutas para todos los niveles, desde sencillas caminatas hasta desafíos como la subida al Pico Chamizo, que alcanza los 1.641 metros, o el recorrido hacia la cruz de Camarolos, a 1.444 metros. Ambas cimas están conectadas por un circuito circular que atraviesa valles y paisajes de silencio, habitados por cabras montesas. El Mirador de Hondonero, accesible en coche, es un excelente punto de partida. Desde aquí se puede explorar la Sierra de San Jorge, con su área recreativa equipada para barbacoas y actividades al aire libre, o adentrarse en un bosque de quejigos que en invierno luce su faceta más mágica, con collados y lagunas que, a menudo, se congelan durante esta estación.

Tolox: puerta de entrada a la Sierra de las Nieves

El Parque Nacional de la Sierra de las Nieves tiene en Tolox una de sus principales entradas. Este pintoresco municipio, con cerca de 2.000 habitantes, combina tradición y naturaleza. Su casco urbano sorprende con grafitis que homenajean la vida rural y con bares donde degustar vinos locales. Entre sus rincones imprescindibles destaca el Barrio del Castillo, coronado por la iglesia de San Miguel, perfecto para capturar fotografías memorables. Tolox ofrece rutas para todos los gustos: desde la visita al Charco de la Virgen y la cascada de La Rejía, la más alta de Málaga, hasta senderos que conducen al río de los Horcajos, la Cruz del Padre Ventura o la ermita de la Virgen de las Nieves. Muchas de estas rutas son ideales tanto para familias como para ciclistas, haciendo de Tolox un destino invernal versátil.

Ronda: planes para perderse una y otra vez

En la emblemática ciudad de Ronda, cada visita es una nueva oportunidad para descubrir rincones que enamoran. Su impresionante patrimonio histórico, la belleza natural que la rodea y su exquisita gastronomía hacen de este destino un lugar para prolongar la estancia más allá de un simple fin de semana. Además de recorrer sus restaurantes y mercados, Ronda ofrece planes como visitas a viñedos, ermitas rupestres o estancias en hoteles boutique frente a parajes únicos como la Cueva del Gato, una joya imprescindible. Si el tiempo lo permite, el cercano Valle del Genal ofrece otro aliciente para explorar esta comarca que nunca deja de sorprender.

Antequera: historia y paisajes Patrimonio de la Humanidad

En pleno corazón de Andalucía, Antequera se erige como un cruce histórico de culturas. Entre sus grandes tesoros destacan los Dólmenes de Antequera, declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO, un vestigio milenario que conecta con el pasado más remoto. El casco histórico invita a pasear por sus calles hasta llegar a la Real Colegiata de Santa María o la alcazaba árabe, mientras que el cercano paraje de El Torcal, a solo 13 kilómetros de la ciudad, despliega un paisaje calizo único, moldeado por millones de años de erosión, que en invierno adquiere una belleza aún más especial.