Cinco jardines diferentes que descubrir en Málaga

En la provincia de Málaga hay bastantes jardines botánicos de gran extensión que disfrutar durante todo el año. La mayoría cuenta con particularidades únicas que los hacen especiales en función del punto del territorio en el que están situados o de las características de las especies que albergan. Si el jardín botánico de La Concepción en la capital malacitana es el más conocido e icónico para el gran público, la mayoría de las localidades tienen sitios reservados para una buena colección de plantas y un paseo entre ellas. Muchos de ellos, como el parque de La Paloma en Benalmádena, La Batería en Torremolinos, la Alameda del Tajo en Ronda o el de La Muralla en Mijas pueblo son referentes de este tipo de instalaciones a los que se acude a disfrutar del esparcimiento y el ambiente especial y un punto más fresco que suelen tener, pero hay algunos jardines en puntos de Málaga que no son tan conocidos y también merecen una visita en estas épocas de altas temperaturas.

Orquidario de Estepona

Es un espectacular edificio que alberga una increíble colección de orquídeas y otras plantas. Es un invernadero con cascadas y otros puntos de agua que se activan en función de las necesidades de las delicadas planas que hay en su interior. En torno a 1300 especies de orquídeas diferentes de todos los puntos del mundo y cinco mil especies vegetales en total es la nómina de lo que se puede disfrutar en un punto céntrico de la ciudad de Estepona. Cierra los lunes y las entradas cuestan infantiles cuestan un euro, el precio de la general es de tres.

Molino de Inca, Torremolinos

Uno de los antiguos molinos que dan nombre al turístico municipio de la Costa del Sol. Se ha reformado y ahora acoge un coqueto jardín botánico en el que también se alberga alguna fauna. Buenas fuentes y un entorno fresco y diferente por el gran número de plantas, está cerca de la zona de los pinares de Torremolinos. Es un sitio uy fotogénico que además alberga en el interior parte de los útiles de lo que era el antiguo molino harinero. Si no se está empadronado en Torremolinos, la entrada cuesta tres euros, aunque hay bonos y otras modalidades de entradas porque es habitual querer repetir.

Jardines del Bienquerido, Alhaurín de la Torre

Se trata de unos jardines de inspiración oriental con gran número de pagodas, plantas y ornamentación asiática con predominancia japonesa. Tiene unas cascadas y un curso de agua que refresca bastante el ambiente y genera un sonido tranquilizador en los más de 10.000 metros cuadrados que tiene, aunque no siempre está activo el curso de agua. Aún así merece la pena pasear por sus sombras y descansar en los lugares que invitan a ello en la instalación que son bastantes. La entrada es gratuita.

Jardines del Muro, Benalmádena

No es un jardín botánico como los anteriores ni una gran extensión de plantas, pero está en la lista por su peculiar situación frente al Mediterráneo. Es un jardín en Benalmádena pueblo, en torno a la iglesia de Santo Domingo de Guzmán, que recorre la antigua muralla árabe del municipio ofreciendo a los visitantes buenas sombras, sitio freso y, sobre todo, unas vistas impresionantes de la costa. Desde la altura a la que está y en su situación tiene una panorámica admirable del castillo de Colomares, toda una peculiar y espectacular obra del municipio benalmadense. Un lugar apacible y distinto donde tratar de mitigar el calor con sombra, brisa marina y bonitas vistas.

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Santa Fiora, Frigiliana

Este es otro peculiar jardín en un punto de la provincia menos caluroso que la media. Se encuentra en Frigiliana, está decorado con bonitas y coloridas figuras cerámicas, no es muy grande, pero tiene la sombra justa, buenas vistas y está cerca de lugares de los más señeros del pueblo. Sus plantas son típicas de esta zona de la provincia y el trazado del parque también es una terraza de las que aprovechan el escarpado terreno axárquico. Un sitio original en el que descansar en la visita a Frigiliana.