Este es el mejor y más divertido pueblo de Málaga para darle la bienvenida al otoño

Cañete la Real es un pueblo con mucho que visitar y disfrutar, pero también con lo que divertirse

Trío de pueblos bonitos de Málaga que visitar antes de que acabe el verano

Imagen aérea de Cañete la Real.
Imagen aérea de Cañete la Real. / malaga.es

En el norte de la provincia de Málaga, en la comarca del Guadalteba, se encuentra Cañete la Real, un pintoresco pueblo con raíces musulmanas, dominado por un majestuoso castillo del siglo IX. En los últimos meses, este encantador destino ha incorporado una serie de detalles únicos que lo convierten en un pequeño paraíso de juegos de mesa para toda la familia. Desde el popular Twister hasta el clásico juego de la rana, pasando por laberintos y señalizaciones creativas que guían a los visitantes por los puntos más emblemáticos del pueblo, Cañete la Real ofrece una variedad de actividades que añaden un toque lúdico a un lugar ya cargado de historia y encanto, ideal para vivir experiencias inolvidables.

Esta iniciativa no solo ofrece entretenimiento para todas las edades, sino que también busca adaptar y evolucionar estas propuestas lúdicas en perfecta armonía con el entorno, que alberga numerosos sitios de interés histórico. Además de los juegos, el pueblo cuenta con murales y pinturas que embellecen sus calles, creando una experiencia visual que complementa la oferta turística de este municipio de la comarca del Guadalteba. Entre las intervenciones más llamativas, destacan las huellas de colores que marcan el pavimento de las calles. Cada color guía a los visitantes hacia restaurantes, rutas de senderismo o monumentos, ofreciendo una forma interactiva y divertida de explorar el pueblo.

El símbolo más imponente de Cañete la Real es el castillo de Hins Canit, una fortaleza restaurada que destaca por su importancia histórica y su gran superficie de más de 3.500 metros cuadrados. Ubicado a unos 800 metros de altitud, el castillo se integra perfectamente en el cerro que lo alberga, lo que le otorga un foso natural que fortalecía su defensa. Este castillo es uno de los mejores ejemplos de arquitectura defensiva en la región.

El interior del castillo de Hins Canit
El interior del castillo de Hins Canit / malaga.es

Al igual que otros enclaves de la actual Andalucía, Cañete la Real fue controlada por los mozárabes liderados por Omar ibn Hafsún durante varias décadas, hasta que en el año 906, el castillo cayó bajo el dominio del futuro califa cordobés, Abderramán III. A lo largo de los siglos, la fortaleza fue escenario de múltiples batallas y cambió de manos en varias ocasiones. En 1330, Alfonso XI la conquistó, pero volvió al control musulmán en 1368, hasta su reconquista definitiva por los cristianos en 1482.

Además del castillo, Cañete la Real alberga otros monumentos de relevancia, como su iglesia de San Sebastián, de 1526 y restaurada en 1797, y el convento de clausura, ambos con un valor histórico que trasciende el propio entramado del pueblo. Entre sus delicias gastronómicas, destacan los piononos, un dulce tradicionalmente vinculado a la provincia de Granada, pero que aquí se elabora con maestría. Para los amantes de la repostería, el Convento del Santo Sacramento, aún habitado, es un lugar donde se pueden degustar estas y otras exquisiteces.

El Convento de Clausura del Santísimo Sacramento de Cañete la Real.
El Convento de Clausura del Santísimo Sacramento de Cañete la Real. / malaga.es

La naturaleza también forma parte del atractivo de Cañete la Real. Justo detrás del municipio, un cortado de piedra ofrece el hábitat perfecto para la observación de grandes ejemplares de buitres, que han pasado a ser parte esencial del paisaje y la biodiversidad local.

stats