Santo Pitote, en Torremolinos.
Santo Pitote, en Torremolinos. / @santopitote

La Costa del Sol es conocida por ofrecer una amplia variedad de beach clubsbeachclubs que se adaptan a todos los gustos, convirtiéndose en destinos populares para el ocio veraniego. Estos establecimientos han experimentado una evolución significativa desde sus inicios décadas atrás, manteniendo su carácter exclusivo, pero ahora también abriendo sus puertas a un público más diverso de la Costa del Sol. Hoy en día, es posible encontrar beach clubs que ofrecen diferentes estilos y ambientes, desde los más lujosos y elegantes hasta los más desenfadados y relajados. La oferta gastronómica también se ha diversificado, con una amplia selección de platos y bebidas para satisfacer todos los paladares. Aquí van cuatro relativamente nuevos a los que no debes perder el ojo.

Malibú Pool Bar (Benalmádena)

El Malibú Pool Bar es el lugar perfecto para vivir una experiencia exclusiva en Benalmádena, justo enfrente del Trocadero. Este acogedor espacio está diseñado para un público joven y adulto (se prohíbe el acceso a menores de edad) que busca disfrutar de un ambiente divertido. Lo primero que destaca es su impresionante piscina infinity de agua salada, que invita a refrescarse y disfrutar del sol. A la entrada, un mural de arte urbano creado por el talentoso grafitero gallego Nesui da la bienvenida a los visitantes y añade un toque artístico al lugar. En cuanto a la oferta gastronómica, el lugar no decepciona. Se pueden disfrutar de deliciosas costillas de cerdo, sándwich club, ensaladas frescas y sabrosas pizzas. Todo ello se puede acompañar con refrescantes margaritas de tequila José Cuervo y refrescantes mojitos. Además, el Malibú Pool Bar también ofrece shishas para aquellos que deseen relajarse con un toque de sabor, así como entretenimiento en forma de billar y futbolín.

Zorro Callao (Rincón de la Victoria)

El beach club Zorro Callao, situado en el hermoso hotel Fay Victoria Beach en Rincón de la Victoria, es una propuesta única y divertida que cautiva desde la primera vez sus visitantes. La pérgola de madera y techo de paja alberga solo 12 mesas, creando un ambiente íntimo y acogedor para que los clientes se relajen y disfruten. Las hamacas están equipadas con sombrilla, cajita fuerte, percha y mesa accesoria, brindando la máxima comodidad para una tarde de sol y playa. Además, las tumbonas cuentan con un toldo y una regadera metálica vintage para refrescar los pies en los días más calurosos. La música chill deep house crea el ambiente perfecto para disfrutar del momento, y es especialmente popular entre los bañistas que aprovechan el espejo para el salvapantallas para capturar divertidos selfies. En cuanto a la gastronomía, el beach club Zorro Callao ofrece una deliciosa selección de paellas, con especial énfasis en la de tartar de gambón, pulpo y sobrasada mallorquina. Los entrantes se deben destacar también, como la ensaladilla rusa al pilpil o los chicharrones de Cádiz.

Santo Pitote (Torremolinos)

Santo Pitote es una nueva opción de beach club situado en la animada playa de Los Álamos, en Torremolinos, donde la diversión y la alegría se combinan para ofrecer una experiencia diferente. Aunque su ambiente es juguetón y desenfadado, su propuesta gastronómica es de primera categoría y sorprende con platos extensos y de alta calidad. Entre sus especialidades culinarias destacan los arroces de presa ibérica y foie, así como los exquisitos arroces de carabineros. Además, su carta incluye platos frescos como ensaladas y deliciosos poké hawaianos que deleitan a los paladares más exigentes. Para acompañar estas delicias, ofrecen una variedad de cócteles, entre ellos el famoso mojito con mango de la Axarquía malagueña. Durante las tardes, los pinchadiscos crean un ambiente mágico y los fines de semana, las bailarinas sobre zancos de vértigo contagian a la clientela con su entusiasmo y energía.

La Cabane (Marbella)

El beach club La Cabane, situado en el hotel Los Monteros en Marbella, ha experimentado una impresionante renovación de la mano del reconocido chef Dani García y el Grupo Mosh, con la valiosa colaboración de la firma italiana Dolce & Gabbana. El resultado es un lugar deslumbrante, decorado con lujosos estampados inspirados en la mayólica de Caltagirone, Sicilia, que ofrece a sus visitantes una experiencia lifestyle playera sin igual. Rodeado de camas balinesas que a su vez rodean la piscina, este lugar exclusivo ofrece una atmósfera elegante y sofisticada. Las toallas, con un valor de 600 euros, y los sofás, que alcanzan los 16.000 euros, aportan un toque de lujo y confort sin precedentes. La carta del chef Dani García se inspira en los sabores de la costa italiana de Amalfi, brindando platos exquisitos que deleitarán a los paladares más exigentes. Además, el postre se sirve en el Dolci Room, un espacio deslumbrante con golosinas e inspiraciones de Dolce & Gabbana. Para disfrutar de esta experiencia única, el precio del cubierto oscila entre 150 y 200 euros. Los visitantes podrán disfrutar de música en vivo y cócteles cuidadosamente elaborados para complementar el ambiente.

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