Una de las playa más tranquilas de Málaga con un secreto por descubrir

El litoral al Este de la capital malacitana tiene un encanto especial. Entre sus tesoros se encuentran algunas de las playas más famosas de la provincia de Málaga, como es la costa de Nerja, con muchas pequeñas y pintorescas calas que invitan a ser exploradas. Esta zona costera cuenta con numerosos pueblos que ofrecen paisajes sorprendentes y una variedad de playas ideales para disfrutar en familia.

Uno de esos encantadores pueblos es Torrox, ubicado en la Axarquía, que se caracteriza por mantener temperaturas suaves durante todo el año. En su término municipal, se encuentran varias playas especiales. Entre las más destacadas se encuentra la que rodea el faro de la localidad, en un entorno salpicado de yacimientos arqueológicos de época romana. Esta playa junto al faro es uno de los rincones con encanto del litoral malagueño.

Esa playa acogedora y diferente en Torrox de la que hablamos es la de Calaceite, que reserva una sorpresa en sus alrededores. Esta playa cautiva con su belleza natural y su ambiente relajado, y atrae a quienes buscan disfrutar de la tranquilidad del mar y el sol. Los paisajes circundantes y las opciones de ocio hacen de Torrox un destino ideal para aquellos que buscan una combinación perfecta de playa y cultura histórica en un entorno mediterráneo único.

La playa de Calaceite en Torrox es una joya escondida en el litoral, que esconde un tesoro submarino cercano. Aunque no es una playa especialmente extensa, su belleza la convierte en un lugar encantador para disfrutar del mar y el sol. Con una arena algo más oscura que otras playas de la zona, se encuentra cerca de la carretera N-340, típica de esta parte del litoral andaluz.

Una torre vigía, parte del antiguo sistema defensivo costero, se alza majestuosa cerca de la orilla, marcando la zona y añadiendo un toque histórico al paisaje. El terreno escarpado que rodea la playa se desploma directamente hacia el mar, creando un ambiente pintoresco y singular. Aunque no es la playa más concurrida, durante la temporada alta suele recibir un poco más de público. Aun así, su tamaño permite encontrar suficiente espacio para disfrutar de un día de sol y baño sin aglomeraciones. Parte de su orilla está compuesta de rocas, lo que la hace ideal para los amantes de la pesca.

Pero lo más sorprendente de esta playa es el naufragio del barco El Delfín, que descansa en sus proximidades. A pesar de tener menos de un siglo de antigüedad, este pecio se ha convertido en una fascinante atracción submarina en la costa malagueña. Su naufragio confiere a esta playa un carácter único en la comarca, ofreciendo a los amantes del buceo y la historia una experiencia única y emocionante si se sumergen en sus aguas.

Aunque el pecio se encuentra relativamente cerca de la orilla y es posible verlo haciendo snorkel, es importante destacar que se requiere conocimiento y experiencia en la práctica submarina para disfrutar de una inmersión segura y en condiciones óptimas. Para aquellos interesados en explorar este fascinante naufragio, es recomendable contar con la asistencia de centros de buceo y empresas especializadas que ofrecen pequeñas inmersiones en la zona.