La protectora de animales de Málaga, al límite por los abandonos durante el verano
Este verano se han abandonado en Málaga 424 animales entre gatos y perros
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Málaga/La Sociedad protectora de animales y plantas de Málaga finaliza el verano con un balance negativo por el abandono de animales. Aunque desde mayo se adoptaron 213 perros y 82 gatos, los abandonos superan esta cifra con 273 perros y 150 gatos. El verano cierra para la protectora con 243 perros, 118 gatos y 78 tortugas en sus instalaciones.
El desplazo de la temporada de caza y la época de la camada de gatos han sido dos acontecimientos que han aumentado en número de animales que tienen actualmente en el recinto. “Los cazadores abandonan los animales que ya no les sirven para la caza y además vienen muchas familias con gatos lactantes”, asegura Carmen Manzano, presidenta de la protectora. “Además hay mucho atropello, animales que llegan en muy mal estado, no por maltrato, sino por accidentes”.
“Las entradas que hay son casi siempre perros de caza, no de caza puros, que son los que nadie quiere. Otro caso de abandono es que mucha gente malentiende que si una persona está embarazada los animales pueden contagiar cosas y se dejan muchos aquí por eso, y eso no es así porque no son contagiosas. Otro motivo es el alquiler, porque en muchos sitios no dejan entrar perros. Las alergias también entran dentro de las causas de abandono”, explica Carmen Manzano.
La presidenta asegura que el número de animales abandonados no varía en exceso de verano en verano, pero que sí han notado que muchos de los que llevan animales a la protectora lo hacen porque “se fían más de nosotros porque no quieren matar al animal”. “Lo que pasa es que mantener esa cantidad de animales y los 14 puestos de trabajo fijo no es barato”, comenta Carmen Manzano.
También se están viendo sobrepasados por los gastos, que se han visto aumentados por la inflación. Además de pagar más luz que otros años, a esto se le suma que cuentan con animales enfermos que necesitan de quirófano o analíticas, fuente de la mayoría de los gastos. “Me parece increíble que el IVA de los toros que es de matar sea de un 10% y el IVA de curar sea de un 21%”, expresa.
“Recibimos donaciones, hay entidades y empresas que hacen aportaciones económicas. También tenemos subvenciones del Ayuntamiento que son anuales, para recibirlas tenemos que recibir 10 animales del Zoosanitario y los cuidamos aquí. Además cuando la policía o los bomberos llaman por algún animal, nosotros vamos con la furgoneta y nos lo traemos” asegura Esther Alcántara, jefa de la protectora. “Fundamentalmente sí que es gracias a las aportaciones de los socios y de los ciudadanos que vienen a traer lo que buenamente pueden”.
“Nos dieron el parque que hay detrás para que pudiéramos pasear a los perros. Además muchas veces se ponían con petardos detrás y el Ayuntamiento ha ayudado con eso”, comenta Leire García, voluntaria de la protectora.
“Cuando un gato entra se le testea por si tiene alguna enfermedad no contagiosa a los humanos pero que sí lo sea para el resto de su especie. Ese gato mientras llegan los resultados está aparte para no contagiar a los demás. No es solo que dejen el gato, es que hay que tener dinero para todas las pruebas y luego para poder cuidarlo o darle tratamiento, además de ponerle el chip”, explica la presidenta. “Con los perros sí que tenemos mucho caso de leishmania, de pago y de moquillo porque en la calle hay mucho. Esos perros no podemos dejarlos junto a otros porque el pago y el moquillo sí que son muy contagiosos y los tratamientos son costosos”.
Lo que más necesita la protectora en estos momentos son voluntarios que sean comprometidos ya que “esto es como un trabajo no remunerado”. “Ahí hay una plantilla y si tu un día no vas, los animales que tengas a tu cuidado no va a poder cuidarlos nadie. Tienes que saber que necesitarás una media de 4 horas al día para poder ser voluntario y ocuparte de los animales”, comenta Carmen Manzano.
María Fernández, voluntaria de la protectora, confirma que “el cuadrante de la semana está prácticamente vacío. Los lunes y los martes son los días que menos gente hay aquí”.
“Además necesitamos padrinos, porque los animales tienen tratamientos costosos y necesitamos de ellos porque a la protectora muchas veces les cuesta mucho suplir esos gastos”, aclara Andrea Romero, voluntaria desde 2018.
“Otro problema que tenemos es que ya no tenemos hueco en las casas de acogida para los gastos pequeños. Hay más de 50 gatos pequeños en casas de acogida que no pueden estar con los grandes porque aún no tiene vacunas ni nada y es peligroso que estén fuera. La gente no entiende que no hay hueco ahora mismo y muchas veces nos dejan aquí a los animales o los sueltan cerca para que los recojamos a la fuerza”, expresa Esther Alcántara. “Nos han llegado a dejar perros atados o nos han llegado a tirar cachorros por las vallas”.
Durante la pandemia, el centro fue estricto en cuanto a las adopciones, ya que después de que se aprobase que si tenías perro podías salir a pasearlo durante el confinamiento, temían que muchos de estos animales fueran devueltos nada más acabase este periodo. “Quisimos evitar este efecto rebote y solo dábamos en adopción a perros y gatos a gente cercana y de confianza”, asegura Carmen Manzano.
Adela Martín, voluntaria de la protectora, expresa que “lo importante es que se adopte, no que se compre, porque estos perros necesitan también una familia”.
La protectora de animales de Málaga cierra un verano negativo en cuanto a abandonos de perros y gastos. Además de la subida de precios que ha hecho que los tratamientos sean más caros, también han sufrido una ligera bajada de los socios que ha hecho que su presupuesto sea aún más ajustado.
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