El pueblo de Málaga que vive bajo los 'Pirineos de la Costa del Sol'

La provincia de Málaga se caracterizada por poseer, a lo largo y ancho de su geografía, todo un mundo de posibilidades. Desde la magia de su costa hasta sus montañas de cuento. Es en este último espectro donde aparece uno de esos pueblos únicos de Málaga, un pequeño rincón de la comarca de la Axarquía que descansa bajo lo que se ha popularizado de un tiempo a esta parte como los Pirineos de la Costa del Sol o los Pirineos del Sur. Hablamos de Alfarnatejo –y de refilón, de Alfarnate–.

Yéndonos a la parte más norte de la Axarquía es donde aparecen tanto Alfarnatejo como Alfarnate, dos de esos pueblos con un claro pasado árabe que en el pasado tuvieron un claro papel en la producción de recursos como el cereal y la harina. De la leyenda que los define como tejones, a los primeros, y a palancos, a los segundos, se hace eco la prestigiosa revista Traveler: "Una gran piedra fue a parar a la mitad del camino principal de la zona, impidiendo el paso. Los habitantes de ambas poblaciones decidieron colaborar para moverla. Los de Alfarnate intentaron hacer palanca con palos, sin éxito, mientras que los de Alfarnatejo propusieron excavar bajo tierra, a la manera que hacen los tejones, para crear un socavón y hacer rodar la mole, solución que acabó dando resultado y apartando la piedra del camino".

Ambos pueblos comparten ese espacio en la geografía malagueña, que como señalan desde Traveler, ocupando "un espacio privilegiado que se ha popularizado en la región como los Pirineos de la Costa del Sol o los Pirineos del Sur". Es a Alfarnatejo al que más se le ha asociado esta particular denominación que atrae a turismo rural y relacionado con el senderismo, y no es para menos.

"Quizás el motivo lo encontremos en su particular disposición, encajonado en una depresión entre los picos Chamizo, Gallo y Vilo, con altitudes que llegan a sobrepasar los 1.600 metros. Teniendo en cuenta que Alfarnatejo se asienta sobre los 925 metros de altitud, podemos imaginar lo imponentes que pueden parecer estos relieves circundantes, que se yerguen sobre el plano a escasa distancia", explican sobre este particular pueblo de Málaga, que cuentan en su entorno con "los tajos más impresionantes de toda la provincia" y de la que destacan "paisajes de una riqueza visual incuestionable".

Y es que la zona es un buen punto de partida para muchos amantes del senderismo: "Una de las más transitadas es la correspondiente a uno de los tramos de la Gran Senda de Málaga, que transita entre las localidades de Alfarnatejo y Alfarnate realizando un amplio recorrido que aprovecha el camino natural que conducía hacia la costa".