La Rayuela
Lola Quero
El rey de las cloacas
Pueblos bonitos, blancos, bellos, tranquilos, grandes, pequeños, sensibles, increíbles y cien por cien malagueños. Málaga es una tierra rica de pueblos enriquecedores, los más de cien que conforman su provincia tienen todos y cada uno de ellos algo que les hace especial, una historia, una costumbre, un plato, una zona o su simple existencia. La prestigiosa revista de viajes National Geographic ha realizado un riguroso listado de cuáles son los pueblos que, a su juicio, son los más bonitos de toda Málaga: ha elegido diez.
"De tradición pesquera y agrícola, Nerja no solo cuenta con el nostálgico Parque de Verano Azul y el Barco de Chanquete, sino que también tiene otras zonas que se asoman al mar, como su famoso Balcón de Europa, que ofrece vistas de los arenales y los acantilados que caen sobre el Mediterráneo", destacan sobre Nerja, un paraíso en cualquier época del año que en verano recibe numerosas visitas por su cálida temperatura y sus playas de ensueño.
"Habitada desde el paleolítico, los numerosos restos que la envuelven – el Conjunto Dolménico de Menga, Viera, Romeral y El Alcaide – hacen de una visita a este pueblo un viaje al pasado", mencionan sobre Antequera, el municipio más extenso de la provincia y uno de los que más puede aportar. Necesitas de algunos días para descubrirla por completo.
El Acebuchal, tras 50 años en el olvido, vuelve a tener vida y es un rincón escondido bajo el manto del Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama: "Después de que, en 1949, se despoblase del todo, El Acebuchal quedó abandonado por 50 años, hasta que una pareja cuyos padres vivieron allí decidió volver y darle vida de nuevo al lugar".
De Casabermeja destacan que, pese a ser pequeño, esconde entre sus calles "cuatro lugares declarados Bien de Interés Cultural: la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora del Socorro, el Cementerio de San Sebastián, el Conjunto Pictórico de Peñas de Cabrera y la Torre de Zambra". Sus numerosas rutas y la tranquilidad del pueblo blanco, garantías de confort.
Cómo no iba a estar Ronda entre la selección de National Geographic. El pueblo más romántico de España también es mencionado por su "trazado de herencia morisca y el conjunto de casas blancas con blasones y refrescantes patios que se arremolinan en el centro histórico acaban por rematar el conjuro de enamoramiento que hechiza a los viajeros actuales".
Frigiliana es otro de los pueblos que no se pierde una en este tipo de listados, cuando se habla de la belleza de sus calles. "Cuenta con la iglesia de San Antonio, cuyo campanario es el alminar de una anterior mezquita. El Barribarto, su núcleo antiguo, invita a pasear por calles de paredes encaladas adornadas con tiestos de flores, mientras se descubren escalinatas, pasadizos y patios escondidos", destacan entre otros puntos y aspectos del pueblo.
"El castillo de Casares, una fortaleza construida por los árabes en el siglo XIII, fue creada como bastión defensivo del reino nazarí, y sus murallas delimitaban la extensión del pueblo. Hoy son uno de los pocos vestigios que se conservan en pie", mencionan sobre Casares, otro pueblo bello y fresco que descansa en lo alto de una colina a los pies de la sierra Crestellina.
Mijas es otro pueblo encantador que cuenta con el burro como su particular icono: "Una escultura de bronce junto a la Oficina de Turismo es la protagonista de la Plaza de la Virgen de la Peña de Mijas. Se trata de un burro, el símbolo de la localidad. El tesón y la disciplina de trabajo de estos animales fueron la herramienta gracias a la que los trabajadores de las canteras podían recorrer las empinadas cuestas".
"La Plaza Ochavada, de planta octogonal, constituye el punto de referencia en el centro histórico. El patrimonio arquitectónico que se puede descubrir en su interior comprende desde el castillo fortaleza con dos líneas de muralla hasta numerosos edificios religiosos, entre los que destaca la ermita de la Virgen de Gracia o el Convento de Santo Domingo", son algunos de los rincones que alaban de Archidona, otro de los pueblos más bonitos de Málaga a ojos de National Geographic.
Por último, pero no por ello más o menos bonito, Genalguacil, un pueblo que emana cultura por sus calles y no sólo en un sentido metafórico: "Quizás es este gusto por la estética del que se han visto contagiados sus habitantes desde tiempos inmemoriales lo que explica que Genalguacil se haya convertido en un pueblo-museo de referencia. Y es que es ya toda una tradición que, desde 1994, cada año diferentes artistas dejan su huella en forma de obra de arte en las calles del pueblo. Un legado que se cuida y conserva convirtiendo el municipio en un auténtico museo al aire libre".
También te puede interesar
Lo último
No hay comentarios