Dos de los pueblos más coquetos de Málaga, unidos por esta disfrutable ruta de senderismo

Enclavados en el corazón de la Axarquía, los municipios de Árchez y Canillas de Albaida están conectados por un sendero que invita a descubrir su historia y su belleza natural. La Ruta de los Molinos del Río Turvilla es un recorrido de carácter circular que combina la riqueza paisajística con el legado patrimonial de estos dos pueblos blancos. Este sendero no solo permite adentrarse en la exuberante naturaleza de la zona, sino que también atraviesa las calles de ambos municipios, ofreciendo una experiencia única que va más allá del senderismo convencional. Con un mantenimiento óptimo y puntos de descanso como fuentes y pasarelas, se trata de una ruta accesible y perfectamente señalizada, ideal para disfrutar con niños y mascotas.

El recorrido de la Ruta de los Molinos del Río Turvilla coincide en parte con la Etapa 7 de la Gran Senda de Málaga, lo que garantiza su buen acondicionamiento y seguridad. Durante el trayecto, el senderista se sumerge en un entorno natural dominado por la vegetación mediterránea, con almendros, viñedos, olivares y especies subtropicales. En las inmediaciones del río Turvilla, destacan los chopos y las adelfas, creando un paisaje que varía con el paso de las estaciones. La ruta debe su nombre a los antiguos molinos harineros que jalonan su recorrido, testigos de la importancia que tuvo en el pasado la molienda del grano en esta zona de la Axarquía. Hoy en día, algunos de estos molinos pueden observarse en distintas fases de conservación, añadiendo un componente histórico al sendero.

Inicio de la ruta en Árchez: un viaje al pasado

El punto de partida más recomendable es Árchez, donde el estacionamiento es más accesible. Desde la calle Cruz, a pocos metros del inicio de la ruta, se alza la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación, cuya torre campanario mudéjar del siglo XIV es uno de los vestigios arquitectónicos más representativos de la Axarquía. El sendero desciende hasta el paseo del río Turvilla, donde un panel informativo introduce al visitante en la historia del entorno. Poco después, se cruza un puente que conduce al Antiguo Molino de Doña Fidela, una de las construcciones que en su día jugaron un papel esencial en la molienda del trigo.

A medida que el sendero avanza, la ruta se aleja del río para adentrarse en terrenos de cultivo. Los huertos ofrecen una muestra de la diversidad agrícola de la zona, con frutales como aguacates, naranjos y olivos. Siguiendo el camino, aparece el Molino Matías, que, además de ser un antiguo molino harinero, funcionó durante un tiempo como central eléctrica para abastecer a los pueblos cercanos. En este tramo, el sonido del agua es un acompañante constante, y una pequeña cascada situada junto al molino añade un toque pintoresco al recorrido.

Hacia Canillas de Albaida y retorno

Continuando la ruta, unas escaleras conducen a un nuevo sendero que atraviesa una acequia mediante pasarelas metálicas, recientemente restauradas. Durante este tramo, el caminante se encuentra con la Fábrica de José Navas y algunas cascadas que pueden pasar desapercibidas si no se presta atención. El siguiente punto de referencia es el Puente Romano, un enclave estratégico desde donde se puede observar el cauce del río Turvilla. Desde aquí, la Calzada Romana guía al senderista hasta Canillas de Albaida, donde merece la pena detenerse en la Plaza Nuestra Señora del Rosario para contemplar la iglesia de Nuestra Señora de la Expectación.

El tramo final de la ruta comienza en la calle del Carril San Antón, desde donde, a unos 250 metros, se divisa la Ermita de San Antón, una construcción del siglo XVII. Girando a la derecha, el sendero inicia su descenso de regreso a Árchez, un tramo en el que se recomienda caminar con precaución debido a la pendiente. A medida que se avanza, la ruta vuelve a conectar con la zona donde suelen estacionar los vehículos, completando un recorrido que une dos de los pueblos más coquetos de Málaga a través de un sendero que combina historia, naturaleza y patrimonio en cada paso.