Cuatro rutas por toda Málaga para descubrirla por completo

Málaga ofrece tanta diversidad a lo largo y ancho de su provincia que seas como seas, encontrarás lo que buscas. Ser un destino sensacional por su clima no sólo tiene como objetivo la playa y su ancha costa, Málaga también dispone de una infinidad de rutas por las que perderte y descubrir un lado diferente de ella, la más montañosa, la más natural y tranquilizante. Si eres de los que busca paz mientras asciendes a alguno de sus picos, quédate y descubre cuál es tu siguiente trayecto.

El punto más alto de Málaga

Con esta premisa alguno puede visualizar ya alguno de los rascacielos que se están construyendo en la capital, pero hablamos de la cumbre más importante de la provincia, que no es otra que La Maroma. Los 2.069 metros de ascensión que marcan La Maroma, en la Sierra Tejeda, son el gran atractivo de la provincia para montañeros y senderistas. La Sierra Tejeda, que separa Málaga y Granada, cuenta también con otros picos imperdibles como Cima de Tejeda (2.066 metros), Cerro Tacita de Plata (1.887) o el Cerro del Tojo Fuerte (1.828).

La Maroma tiene varias opciones para encararla. Las más habituales son las que se pueden iniciar desde la cara norte, desde Alcaucín, en Málaga, y desde la Alhama de Granada. La gran variedad de vegetación que ofrecen estas, donde destacan los bosquetes de tejos y arces, le dan una dimensión espectacular, preciosa, aunque todas tienen su encanto y las hacen únicas. También se puede acceder por el lado sur, desde Canillas de Aceituno y Sedella. Cualquiera de ellas colman en La Maroma y sus impresionantes vistas de toda Málaga y el basto mar. A medida que entramos en invierno, su dificultad crece y se recomienda una mayor precaución y seguir las recomendaciones.

La cumbre del Torrecilla

El Torrecilla es otro de los grandes picos de la provincia de Málaga. No sobrepasa esa barrera de los 2.000 metros que se pueden llegar a tocar en La Maroma pero sí alcanzas los 1.919 metros de altitud en la magnífica Sierra de las Nieves, uno de los parques nacionales de España. Su gran comunidad de abetos y pinsapos lo transforman en un paraje excepcional para perderse, por ejemplo en Tolox donde hay uno de los bosques más completos que aportan una experiencia que en casa paseo es irrepetible. Copar el Torrecilla es un placer también indescriptible, da poder al que lo consigo por lo lleno que deja el paisaje. Desde sus 1.919 metros se puede contemplar todo el mar e incluso Marruecos además de media Andalucía, con todo el vasto sistema montañoso que ofrece.

El Saltillo de Canillas de Aceituno

El puente colgante que une Canillas de Aceituno y Sedella, denominado El Saltillo de Canillas de Aceituno, es otro de los puntos más interesantes por recorrer en Málaga. Desde su inauguración ha resultado ser todo un éxito en la zona por la cantidad de gente que viene a estos municipios a hacer esta ruta de 11 kilómetros. Se inicia desde Canillas del Aceituno y tras un travesía excepcional, se llega a este puente colgante a 50 metros de altura que está por encima del río Almanchares. Tras éste, se asciende hasta el mirador Collado de los Pozuelos, y ya se da paso hasta el municipio de Sedella donde se da por concluido el recorrido. Hay un autobús que hace el viaje de vuelta a Canillas de Aceituno para aquellos que no quieran hacerlo a pie.

Los Montes de Málaga

Los Montes de Málaga es otro destino ideal para hacer una ruta en Málaga. Es la que está más próxima a la capital y tiene muchos puntos de acceso, todos sencillos, y ofrece una fauna y flora muy especial para los que recorren sus senderos llenos de pinos. Entre sus amplios caminos está el lagar de Jotrón, apto para todo tipo de estados de forma, y que deja también un bonito paseo hasta llegar hasta una vieja posada de la que aún se pueden apreciar algunos de sus muros. También puedes observar si le echas un ojo con mucho detenimiento a un antiguo poblado mozárabe.