Una de las rutas de senderismo más misteriosas y antiguas de Málaga: mil años de historia

Entre los numerosos rincones que la provincia de Málaga guarda en su territorio, nos detenemos en uno de los declarados como singulares, un prodigio de la naturaleza por su longevidad: el Castaño Santo de Istán. Este impresionante ejemplar, de gran belleza y majestuosidad, se encuentra cerca del encantador municipio de a los pies de la Sierra de las Nueves. Se estima que este antiquísimo castaño tiene entre 800 y 1.000 años de edad y compone de gran valor alguna de las rutas de senderismo que se pueden seguir para llegar a este misterioso, antiquísimo y místico árbol.

Las rutas más comunes para llegar al árbol milenario son la ruta en bicicleta Istán-Castaño Santo, que está muy bien señalizada, o bien otra que comienza desde San Pedro de Alcántara, muy cerca del campo de golf La Quinta, alrededor del cual se debe rodear. Como siempre, recomendamos ojear siempre previamente algún track GPS para evitar perderse –por ejemplo, en Wikiloc–.

El lugar posee una mística especial y llegar a él no resulta especialmente difícil, ya que hay varias zonas cercanas donde se puede estacionar el coche y comenzar la caminata. En cualquier caso, la ruta es relativamente sencilla, aunque destaca por su longitud y duración. Dependiendo del punto de partida, el trayecto de ida puede llevar alrededor de tres horas de caminata para llegar al Castaño Santo. Además, hay que considerar el tiempo necesario para contemplarlo y luego regresar al punto de partida. Por lo tanto, es importante planificar adecuadamente la ruta.

Dentro de la excepcional belleza paisajística de Istán se encuentra el longevo Castaño Santo, un árbol enorme y poderoso que se ubica en la Sierra Real del municipio, en el Hoyo del Bote. Este paraje añade aún más valor a este hito de la naturaleza malagueña. Se estima que el Castaño Santo tiene entre 800 y 1.000 años de edad, con una altura cercana a los 23 metros y un perímetro de unos 14 metros, lo que da una idea de su imponente presencia una vez que te encuentras bajo su sombra, entre grandes ramas y hojas.

Según los registros históricos, hace más de 500 años, después de la toma de Ronda el 31 de marzo de 1485 y antes de la conquista de Marbella el 11 de junio del mismo año, los Reyes Católicos, especialmente el rey Fernando el Católico, celebraron una misa bajo la sombra de este emblemático árbol de Andalucía y España, uno de los más longevos conocidos. Posteriormente, Felipe II también ofició una misa con sus ejércitos bajo la copa del Castaño Santo antes de la toma del fuerte del Pico de Armas, casi 100 años más tarde, en 1570.