Dos terrazas infinitas en Torremolinos: rooftops con vistas increíbles

Las azoteas, conocidas actualmente como rooftops cuando albergan bares o restaurantes, se han convertido en puntos destacados en los destinos turísticos que disponen de edificios aptos para ello. Son terrazas ideales para relajarse y disfrutar en cualquier estación del año, pero en el verano malagueño adquieren un encanto particular. Una de las atracciones más fascinantes de estos espacios es la oportunidad de observar las ciudades desde una perspectiva única, aunque también brindan otras experiencias a destacar. Torremolinos es una de esas localidades que ofrecen buenas opciones de terrazas infinitas, un municipio ideal para pasar unas vacaciones, y allí se encuentran dos de los rooftops de los que hablamos de cara a este verano.

Sky & Sea Rooftop

La impresionante azotea Sky & Sea del hotel Meliá Costa del Sol ofrece una experiencia verdaderamente única. Este exclusivo rooftop cuenta con una piscina, zonas de relajación y áreas para tomar el sol, diseñadas para disfrutar plenamente del entorno en todo su esplendor. Cada detalle ha sido meticulosamente planificado para proporcionar un día inolvidable de sol, paisajes y momentos de desconexión.

La extensa selección de cócteles y la posibilidad de comer en esta singular terraza, que domina toda la bahía torremolinense, son un auténtico placer para los sentidos. Cabe destacar que este rooftop está reservado exclusivamente para adultos, y las noches de verano aquí brindan una experiencia única que merece ser vivida. El tiempo parece transcurrir de manera diferente mientras contemplas el horizonte y admiras la bahía de Torremolinos. En días despejados, incluso se puede vislumbrar África. Situado en la playa de El Bajondillo, el Sky & Sea Rooftop está a pocos pasos de los principales atractivos del municipio, ofreciendo la oportunidad de explorar lo más destacado de la zona con gran facilidad.

Barracuda Rooftop

Situado también en Torremolinos, este hotel brinda una experiencia única desde lo alto de sus instalaciones. Se encuentra en este caso cerca de Benalmádena, en los últimos tramos de La Carihuela, entre el Barracuda y el Meliá Costa del Sol, ofrece una vista panorámica impresionante. Desde aquí, se puede apreciar tanto la bahía torremolinense como la costa de Benalmádena y la parte más occidental de Torremolinos.

Este lugar se destaca principalmente por sus cócteles, afterworks y momentos de relajación en una terraza meticulosamente diseñada. Los atardeceres y las noches son especialmente encantadores gracias a la ubicación del hotel en primera línea de playa. Es una joya para quienes buscan una alternativa distinta para el ocio veraniego, en una zona de Torremolinos que ofrece magníficas playas y una variada oferta gastronómica.