Tres increíbles cuevas en Málaga para viajar a otros mundos

A menudo buscar nuevas experiencias y sensaciones es una práctica muy satisfactoria en el tiempo libre. Darle argumentos a la mente y la imaginación para que procesen paisajes, olores, tactos y emplazamientos diferentes a lo habitual es una buena manera de de ganar en calidad de vida aunque en ocasiones no se tenga muy en cuenta. Los mundos subterráneos cumplen gran parte de estas premisas y, además, en las últimas décadas se han adaptado un gran número de cavidades a las visitas guiadas reduciendo el riesgo físico que hay en este tipo de visitas y potenciando con iluminación y perspectiva los puntos más espectaculares de estas grutas. En la provincia de MálagaMálaga hay bastantes emplazamientos de este tipo, pero hay tres que sobresalen por su espectacularidad, su valor científico y los detalles históricos alrededor de ellas. La Cueva de Ardales, la Cueva de NerjaCueva deNerja y la Cueva del Tesoro, en el Rincón de la Victoria. Todas con trabajos científicos en los que se ha desentramado parte de la actividad humana en ellas o sus orígenes. Son, además, tres buenas opciones para elegir ya que en torno a ellas hay diferentes opciones de ocio para completar una buena jornada.

La Cueva de Ardales

Es un referente en muchos aspectos en el Sur de Europa. Recientemente celebró sus dos siglos de puesta en valor y más frescos son aún las noticias que explican su importancia en el estudio de la evolución de la vida humana, no en vano cuenta con más de mil pinturas humanas en su interior. Trinidad Grund fue quien la dio a conocer como patrimonio en el primer cuarto del siglo XIX y recientemente se han estudiado y datado pinturas de neandertales (más de 60.000 años de antigüedad) que confirman que los antecesores del homo sapiens pensaban en el futuro y tenían más recorrido intelectual del que habitualmente les otorgaba la ciencia. Es un lugar muy importante en los estudios de los habitantes de la península ibérica en el pasado y no sólo hay restos del paleolítico, también del periodo neolítico. Además, los trabajos en ella han ido datando la presencia continua de humanos en el paraje excepto en un lapso de 7.000 años en los que se cree que el entorno cambió y los humanos emigraron un poco más al norte. Luego volvieron. Uno de esos sitios que parece increíble cuando se repasan los aportes arqueológicos que ha dado. Todo un bagaje histórico que se compenetra con unas estancias espectaculares y un entorno en el que se pueden visitar otros puntos de interés como el Caminito del Rey o la playa de agua dulce de Ardales. Uno de esos puntos imprescindibles que visitar. Un espacio eterno en medio de un entorno natural único.

La Cueva del Tesoro, Rincón de la Victoria

Su historia es muy rica y sus estancias tienen un punto de espectacularidad más que reseñable. Está en el Rincón de la Victoria, cerca de la línea costera, con numerosos y ricos puntos de pasado fenicio no lejos de su emplazamiento. Su nombre se debe al hipotético tesoro musulmán que oculta, pero las historias que conforman su pasado son ricas e inesperadas. Se estima que Marco Licinio Craso (junto a Julio César y Pompeyo formó el primer triunvirato de la antigua Roma) vivió en ella durante un periodo de tiempo en el que tuvo que huir de la península itálica. Además, está el tesoro almorávide, que tiene una parte de fundamento histórico y que hizo que viajeros románticos lo buscasen en la cueva. Uno de ellos, el suizo Antonio de la Nari, perdió la vida con una de las cargas de dinamita que utilizaba par explorar el terreno. Hoy en día es una de las cuevas más bonitas que visitar en la provincia de Málaga. Un lugar tan espectacular, que en los últimos años alberga un buen número de rodajes cinematográficos.

Cueva de Nerja

Es la más famosa de las tres, catapultada hasta ser uno de los lugares más visitados por el turismo. En sus impresionantes cavidades se acogen conciertos, grabaciones de películas e investigaciones. Uno de los complejos turísticos más conocidos de la provincia malagueña con argumentos para ello y eso que su descubrimiento se produjo en 1959, hace poco más de 60 años. En su entorno también hay buen número de yacimientos fenicios que visitar, parajes naturales de gran valor ecológico como los acantilados de Maro, que son una de las 14 joyas del medio ambiente malagueño. Además, en los alrededores hay un bonito jardín botánico con plantas de la zona y la preciosa localidad de Nerja, con el Balcón de Europa, su casco histórico y una gran oferta de restaurantes y lugares de ocio. La cueva es un viaje a un mundo fresco, majestuoso e inesperado que tiene alrededor una buena suma de propuestas de ocio para completar la visita.